La lectora llamó ayer alarmada, por el «sistema» que empleaba una cuadrilla de funcionarios municipales al mediodía anterior para el «bacheo» de la Avda. Rodó. Eran 4 obreros más el chofer, nos relató.
Uno arriba del camión procede a llenar el balde. Otro lo vuelca en el pozo y el tercero procede a pisar el relleno. El cuarto hace de «vigía», mira para todos lados mientras fuma y alerta si viene algún vehículo. En 5 minutos hicieron una cuadra y recién después procedieron a colocar un cono.
Si para esta tarea, mal hecha, porque para advertir el riesgo colocaron el cono recién después de haber finalizado el trabajo, se requieren cinco personas. No imaginamos cuántos se necesitan para hacer el bacheo de la ciudad, nos añadió.
Gente de las inmediaciones de la cañada Doña Jacinta, nos afirma que es alto el número de yararás existentes en el lugar. Los animales que con la falta de pasto verde, por las heladas, se acercan a comer las hojas de los sauces, frecuentemente son mordidos y mueren.
A varios equinos y otros animales les ha pasado esto. En el lugar siempre aparecen yaras, incluso se las encuentra pisadas por los vehículos sobre la ruta. Deben tenerlo en cuenta quienes acostumbran a ir hasta el monte, aunque de todas formas, de cuando en cuando también los ladrones de ganado hacen sus incursiones en las cercanías.
La lectora llamó ayer alarmada, por el «sistema» que empleaba una cuadrilla de funcionarios municipales al mediodía anterior para el «bacheo» de la Avda. Rodó. Eran 4 obreros más el chofer, nos relató.
Uno arriba del camión procede a llenar el balde. Otro lo vuelca en el pozo y el tercero procede a pisar el relleno. El cuarto hace de «vigía», mira para todos lados mientras fuma y alerta si viene algún vehículo. En 5 minutos hicieron una cuadra y recién después procedieron a colocar un cono.
Si para esta tarea, mal hecha, porque para advertir el riesgo colocaron el cono recién después de haber finalizado el trabajo, se requieren cinco personas. No imaginamos cuántos se necesitan para hacer el bacheo de la ciudad, nos añadió.
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A varios equinos y otros animales les ha pasado esto. En el lugar siempre aparecen yaras, incluso se las encuentra pisadas por los vehículos sobre la ruta. Deben tenerlo en cuenta quienes acostumbran a ir hasta el monte, aunque de todas formas, de cuando en cuando también los ladrones de ganado hacen sus incursiones en las cercanías.
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