Las Juntas Departamentales se rigen legalmente por lo establecido en primera instancia por la Constitución de la República, luego por la Ley Orgánica Municipal y finalmente por los reglamentos internos que cada Junta se dé, las que se complementan y afinan detalles de funcionamiento de la casuística de situaciones que suelen plantearse en el trabajo cotidiano, como el que se prevé justamente en el reglamento interno, como sucede respecto a la forma de votar determinadas resoluciones o también en la previsión de la conformación de comisiones que asesoran de forma permanente el trabajo del legislativo. Para este informe y para no agobiar al lector, de aquí en más cada vez que se cite un artículo, el mismo estará referido a nuestra Constitución de la República.
Será en el último domingo del mes de mayo siguiente a la elección nacional cuando se produzca la elección de los gobiernos departamentales formados por una Junta Departamental, el Intendente, y tras la reforma constitucional de diciembre de 1996, se sumó en un tercer orden a las Alcaldías y Concejales de sus respectivos Municipios (artículo 262).
Las Juntas Departamentales se compondrán de 31 miembros (artículo 263), requiriéndose para poder formar parte del legislativo 18 años cumplidos de edad, ciudadanía natural o legal con 3 años de ejercicio y ser nativo del departamento o estar radicado en él desde 3 años antes, por lo menos (artículo 264), durando en su cargo 5 años, eligiéndose con cada miembro titular, el triple número de suplentes (artículo 265). Solo una ley sancionada con el voto de dos tercios del total de componentes de cada Cámara podrá modificar el número de integrantes de la Junta Departamental (artículo 269).
Las Juntas Departamentales y los Intendentes serán elegidos directamente por el pueblo (artículo 270). “Los cargos de miembros de las Juntas Departamentales se distribuirán entre los diversos lemas, proporcionalmente al caudal electoral de cada uno, sin perjuicio de lo establecido en los apartados siguientes. Si el lema que haya obtenido el cargo de Intendente sólo hubiese obtenido la mayoría relativa de sufragios se adjudicará a ese lema la mayoría de los cargos de la Junta Departamental, los que serán distribuidos proporcionalmente entre todas sus listas. Los demás cargos serán distribuidos por el sistema de la representación proporcional integral, entre los lemas que no hubiesen obtenido representación en la adjudicación anterior” (artículo 272).
Es por esa razón que en noviembre de 2020 la Corte Electoral adjudicó al partido de gobierno, el Frente Amplio la suma de 16 cargos de Ediles titulares en la Junta Departamental, 10 cargos al Partido Nacional y 5 al Partido Colorado. Al momento de escribir este Informe, una Edila titular del Partido Colorado forma parte de la bancada del Frente Amplio, sumándose un cargo al oficialismo y quedando el Partido Colorado con solo 4 cargos titulares.
“La Junta Departamental ejercerá las funciones legislativas y de contralor en el Gobierno Departamental. Su jurisdicción se extenderá a todo el territorio del departamento” (artículo 273). Para poder ejercer la función de contralor, con solo 11 votos los Ediles pueden llamar a sala al Intendente (artículo 285) o hacerle pedidos de informes por escrito (artículo 284), así como también formar comisiones investigadores sobre temas puntuales que merecen la especial atención del legislativo (artículo 286).
“No podrán formar parte de las Juntas Departamentales y de las Juntas Locales, los empleados de los Gobiernos Departamentales o quienes estén a sueldo o reciban retribución por servicios de empresas privadas que contraten con el Gobierno Departamental” (artículo 290).
“Los Intendentes, los miembros de las Juntas Departamentales y de las Juntas Locales, tampoco podrán durante su mandato: 1) intervenir como directores o administradores de empresas que contraten obras o suministros con el Gobierno Departamental, o con cualquier otro órgano público que tenga relación con el mismo, 2) tramitar o dirigir asuntos propios o de terceros ante el Gobierno departamental” (artículo 291). La inobservancia de esto “importará la pérdida inmediata del cargo” (artículo 292).
“Son incompatibles los cargos de miembros de las Juntas Locales y Departamentales con el de Intendente, pero esta disposición no comprende a los miembros de la Junta Departamental que sean llamados a desempeñar interinamente el cargo de Intendente. En este caso quedarán suspendidos en sus funciones de miembros de la Junta Departamental, sustituyéndoseles, mientras dure la suspensión, por el suplente correspondiente” (artículo 293). “Los cargos de Intendente y de miembros de Junta Departamental, son incompatibles con el ejercicio de otra función pública electiva, cualquiera sea su naturaleza” (artículo 294).
“Los cargos de miembros de Juntas Departamentales y de Juntas Locales serán honorarios” (artículo 295). Pero como expresa el propio Presidente de la Junta Departamental en este informe, de todas maneras los Ediles son acreedores de ciertos beneficios que le auxilian a poder desarrollar su función.
Los Intendentes y los miembros de la Junta Departamental podrán ser acusados ante la Cámara de Senadores por un tercio de votos del total de componentes de dicha Junta (11 votos) por los motivos previstos en el juicio político, que sería lo dispuesto en el artículo 93, es decir, “por violación de la Constitución u otros delitos graves”. Ante la aplicación de este instituto del juicio político es que el Edil Roque Barla fue separado definitivamente de su cargo recientemente. El cargo no se pierde dentro del lema por el cual fue elegido, pasando su primer suplente a ocupar la titularidad del mismo.
“Es fácil salir a la prensa a criticar, pero no se aparecen por la Junta cuando tienen que trabajar”
Gonzalo Rodríguez, Presidente de la Junta Departamental de Salto
El Presidente de la Junta Departamental de Salto (JD), el Edil Gonzalo Rodríguez, dialogó con EL PUEBLO para profundizar sobre algunas declaraciones realizadas previamente a radio Arapey y al programa televisivo de Jorge Rodríguez “Animal Político” respecto a las faltas o ausencias de los Ediles en las sesiones del legislativo, donde dejó claro que los Ediles del Partido Colorado son los que más inasistencias tienen (69,48%), seguido de cerca por los Ediles del Partido Nacional (67.95%). Rodríguez dejó claro que los Ediles oficialistas también están faltando a las sesiones plenarias del legislativo en un porcentaje importante, con un 51,8%. Además, hizo referencia al trabajo de la JD en materia de proyectos de inversión.

– ¿Son honorarios los cargos de los Ediles?
– Son honorarios en la medida que uno no recibe una retribución económica para ejercer el cargo de Edil, pero no es honorario en la medida de los beneficios que obtiene. Los Ediles titulares obtienen como beneficios la patente gratis de un vehículo, 200 litros de nafta por mes y un pasaje por mes a Montevideo. El Edil suplente recibe la patente gratis en la medida que pueda asistir a 6 sesiones consecutivas de la JD o 10 sesiones alternadas en el período de un año, que va de 15 de julio a 15 de julio. Vale recordar que el suplente podrá asistir a esas sesiones en tanto el titular le ceda la banca.
– ¿Es por eso que se pasa lista de asistencias a los Ediles?
– Por eso mismo, por los beneficios.
– ¿Hubo polémica cuando hizo público el porcentaje de inasistencias de los Ediles?
– Si, hubo Ediles que dijeron que me estaba refiriendo solo a los Ediles titulares, y acá puede verse (muestra una enorme hoja con nombres de Ediles con anotaciones) que faltan mucho los Ediles. Del 15 de julio al 16 de marzo hemos tenido 22 sesiones. Lo que hice fue sumar todas las faltas de todos los Ediles y hacer una regla de 3. Hay Ediles que ya no figuran, algunos porque renunciaron, otros porque se fueron a vivir a Montevideo, como es el caso de 2 Ediles de mi Bancada pero que como no renunciaron, se siguen contabilizando sus inasistencias, o fallecido o destituido como acaba de votar el Senado en el caso de Barla. Pero estaría bueno aclarar que hay casos que los Ediles titulares no han venido pero sí viene su suplente.
– ¿Han llegado a la JD propuestas que incentiven el desarrollo y la inversión en Salto?
– Sí, han llegado. Pero lamentablemente por la burocracia o por intereses espurios han quedado trancados. Nombré 2 proyectos en la radio, uno que estaba de 2018 y este martes la comisión de Legislación y Reglamento lo tomó y trató en una sesión extraordinaria sabiendo que lo nombré en la radio referido al loteo de la zona 6 de termas Arapey, y que terminó siendo votado por unanimidad este jueves. El otro proyecto fue a los pocos días de asumir la presidencia, me vino a buscar Luis Silva, que lo conocí ese día, para mostrarme un proyecto que él tenía y que aún no había ingresado a la JD. Se trata de un proyecto de habilitación a lotear los terrenos, ni siquiera de construcción de viviendas. Ahí entró la DINAGUA (Dirección Nacional de Aguas), vino a la JD y puso un freno, no sé cuál es el motivo. Era mucho más fácil sacar adelante ese proyecto que son aproximadamente unas 6 u 8 manzanas alrededor del Barrio La Amarilla. La DINAGUA dice que si se empieza a construir allí los pobladores que viven de ahí en adelante van a sufrir las construcciones, pero lo que en realidad está acá para votarse no es la habilitación para construir sino la habilitación para lotear, que es un paso previo a construir. Se necesita poder lotear ese terreno para luego vender a cooperativas.
– ¿No es que luego de lotear los terrenos es que se pueden instalar los servicios de agua, saneamiento y electrificación de la zona?
– Exactamente. Pero se está frenando un paso previo que va a llevar a que se pueda lotear ese terreno para que se pueda vender y las cooperativas de vivienda puedan recién luego construir sus casas. Si nosotros habilitamos el loteo, casi seguro que obligamos a la DINAGUA a acelerar el proceso por las mismas cooperativas que accederían al terreno pero sin la posibilidad de comenzar a construir. Ese tipo de burocracia no permite que se pueda avanzar en la solución de viviendas y en generar fuentes de trabajo.
– Cuándo se construyen edificios en la ciudad, ¿se requiere la venia de la JD?
– Sí, se requiere. De los proyectos que han venido, el último fue el que trajo mucho comentario en la prensa que es el que se va a construir frente al Club Remeros. Eso todavía está trabado porque se fue a la Justicia, pero ese tema ya fue resuelto en la JD.
– ¿No ingresó aún a la JD el anunciado proyecto de los barrios residenciales?
– No entró, sabemos que está en un trámite previo en la Intendencia. Cuando ingrese a la JD como todo proyecto que involucre trabajo y vivienda para la gente, trataremos de sacarlo cuanto antes. Las Comisiones de la JD ya están aceitadas para eso, porque sabemos que la carencia más grande que tiene el departamento es la falta de trabajo.
– La última palabra es suya.
– Esperemos que los Ediles que no están viniendo, vengan, que es para lo que la gente los eligió. Esperemos que se pongan las pilas y vengan a trabajar, porque después es fácil salir a la prensa a criticar pero no se aparecen por la Junta cuando realmente tienen que trabajar.
“Tenemos que buscar diálogo y tratar de generarlo entre todos sin andar tirando piedras”
Facundo Marziotte, Coordinador Bancada Ediles Partido Nacional
EL PUEBLO consultó al Coordinador de Bancada del Partido Nacional (PN), el Edil Facundo Marziotte, sobre cómo se analiza desde la oposición el trabajo que se viene realizando en la Junta Departamental (JD), luego de las recientes declaraciones públicas del Presidente de la Corporación y que son ratificadas por el Edil Gonzalo Rodríguez para este Informe.

– ¿Cómo tomó la Bancada del Partido Nacional las recientes declaraciones del Presidente de la Junta Departamental respecto a las faltas y ausencias de los Ediles?
– Sinceramente no le encuentro objeto, no entiendo cuál es la intención del Presidente de decir este tipo de cosas, y además, no son tan lineales, no son cosas que se puedan definir de esa manera, de decir que hay tantas ausencias hablando de porcentajes, con números que son fríos y no tan reales. El trabajo del Edil es mucho más amplio que estar o no en la sesión ese día, que además, como partido debemos decir que en ningún momento dejamos que un tema no sea tratado ni discutido por no estar, siempre hemos estado en los momentos que hay que estar, sean los suplentes o los titulares, tanto en las comisiones como en las sesiones ordinarias y extraordinarias. El trabajo del Edil también tiene que ver con la calle, con estar cerca de la gente, con hacer los planteos desde otro lugar. Hay Ediles que pasan durante la semana muchas horas en la Junta y eso no lo dice el Presidente, están ahí haciendo gestiones, recibiendo gente, trabajando en exposiciones que tienen que ver con el traslado de temas a la Intendencia de Salto.
Lo siento más como un intento de chicana. Me parece que hay que ser más cuidadoso y no tirar solo números que suenan como para tratar de ver si se hace daño a alguien, y en realidad lo único que hacemos es hacerle daño a la institución, que entiendo funciona bien, y la defiendo porque trabajamos desde allí, todos los días hacemos, más allá de estar ese día o no en la sesión, cuando un compañero suplente nos cubre en esa jornada en la banca. Y si hubiera alguna preocupación de parte del Presidente porque realmente no se está concurriendo, hubiese citado a los coordinadores de bancada, estamos a la orden para juntarnos y para que nos diga que no estamos asistiendo y vamos a hablarlo adentro porque por las inasistencias no están saliendo las cosas, pero como eso no es así, lo único que se busca es un circo externo para ver si le hace daño a alguien. Eso no suma para nada.
– ¿Están llegando a la Junta Departamental solicitudes de venias o autorizaciones para que se establezcan inversiones en Salto?
– No. En ese caso, venimos hablando de los barrios privados desde hace por lo menos un año. El Intendente incluso en algún momento lo dijo públicamente de que estaba todo pronto para que se enviara a la Junta, pero seguimos esperando. Esas cosas conllevan al rol que tiene la Intendencia de Salto de enviarnos esos proyectos para que la Junta los apruebe o no, pero que al menos se estudien. Como siempre estamos dispuestos al diálogo y a estudiar cada uno de los temas, lo hemos dicho en reiteradas oportunidades, no solo nosotros sino también los líderes de la coalición de gobierno. Queremos aportar y generar cosas positivas para este tipo de actividades que generan puestos de trabajo.
– Este jueves justamente se aprobó por unanimidad en la Junta una modificación respecto al loteo de la zona 6 en Termas del Arapey, ¿podría tomarse lo aprobado como una forma de incentivar el desarrollo en el trabajo turístico del departamento?
– No tengo duda, sobre todo una actividad que va a generar mano de obra en la construcción, dándole un movimiento que nos parece bien importante, por eso nosotros estábamos afín, más allá que propusimos una pequeña variante que tiene que ver con que los comodatos tengan que pasar por la Junta, porque lo que se intentaba en un principio era que firmáramos una especie de cheque en blanco y que los comodatos los resolviese la Intendencia. Ahí dijimos que no, que era mejor que pasase por la Junta para generar esa cristalinidad necesaria, algo que la bancada oficialista lo tomó y se votó de esa manera.
– La última palabra es para usted sobre estos temas.
– Tenemos que buscar diálogo y tratar de generarlo entre todos sin andar tirando piedras, no suma ese tipo de declaraciones hacia afuera de decir si fulano concurre o no a la Junta, en ese sentido tenemos que ser maduros, juntarnos todos y continuar por el mismo camino que hemos transitado al inicio, que lamentablemente vengo sintiendo últimamente que se ha venido desvirtuando un poco. Hay que seguir por el camino del diálogo para que las cosas salgan, y si es algo bueno para el departamento y para los salteños, siempre vamos a estar en ese lado, algo que hemos demostrado en los hechos, y continuaremos de la misma manera como bancada, trabajando todos los Ediles, titulares y suplentes, como hemos venido haciendo desde el principio. Así que esperamos que sea un año de gestión para sacar temas tan importantes, seguramente porque el año que viene vamos a estar un poco más manchados de lo electoral, lo que hace que las cosas sean diferentes.
Para los ex ediles María Márquez y Carlos Martínez debería haber un sueldo para “transparentar” o “blanquear” situaciones
Aunque “a estos ediles que tenemos ahora no les pagaría nada”, dice María
María de los Ángeles Márquez (Partido Colorado) estuvo en la Junta Departamental 11 años, fue la primer Presidente mujer luego de 63 presidentes hombres y se desempeñó 2 años como Vicepresidente, además de haber integrado decenas de comisiones en el Legislativo. Así conversaba con EL PUEBLO:

-¿Cómo ve el funcionamiento de la Junta actualmente?
¿Funciona la Junta? (sonrisa irónica)…Creo que tenemos la peor Junta Departamental en muchísimos años, por lo menos de 30 años para atrás.
-¿Por qué?
Veo mucha incompetencia, no veo ediles al lado de la gente, recorriendo el departamento. No veo ediles haciendo investigaciones para luego hacer pedidos de informes. Sobre el tema que sea hay que investigar, y eso lleva muchas horas, te lleva muchas horas de tu vida. Realmente hay que trabajar, por eso yo siempre dije que para estar en la Junta uno paga, te lleva mucho, a mí me llevó buena parte de mi vida, la infancia de mis hijos, me llevó un sumario de Primaria porque supuestamente no podía estar en los dos cargos a la vez, sumario que llevó 7 años y luego salió a mi favor, pero lo tuve que pasar. Quiere decir que uno le dedica al Legislativo su vida y tiene que ser pasional.

-Sobre quienes dejan su banca para ir a un cargo en la Intendencia, ¿qué piensa?
Cuando uno se pone en una lista para la Junta Departamental tiene que saber que es para la Junta y no para que después renuncies a la Junta y te vayas a un cargo ejecutivo con una remuneración. Yo no estoy de acuerdo que si te pusiste en una grilla para edil, luego renuncies para ir al Ejecutivo. Si vos querés ser edil, sé edil y si querés estar en el Ejecutivo planteátelo y postulate para estar en el Ejecutivo. Si querés ser remunerado, no vayas a la Junta Departamental, si sabés que la Junta Departamental es honoraria..
-¿Eso debería seguir siendo así o tendría que haber un sueldo para los ediles?
Yo estoy de acuerdo con que los ediles tengan un sueldo, como cualquier Diputado o Senador, por el tiempo que lleva la Junta Departamental trabajarla bien. Ahora, si me preguntás si estoy de acuerdo con que estos ediles que están ahora cobren, te digo que no, yo no le pagaría a ninguno. Ninguno se lo merecería.
-¿Cómo se haría entonces? ¿Sueldo solo para algunos?
Habría que evaluar la gestión, la asistencia, si va a las comisiones… Porque si tomás el trabajo de edil en serio, como lo hacíamos en otras épocas, el trabajo de edil es realmente full time, no tenés horario, a veces en inundaciones a las 3 de la mañana teníamos que salir a ayudar en vehículo propio… Pero eso lo hace alguien que sea un edil de verdad.
-Difìcil mantener otro trabajo entonces…
Es muy difícil. En lo privado y en lo público…
-En lo público está más cobijado el trabajador, ¿no?
No creas… Yo por ejemplo que soy maestra de tiempo completo, no puedo hacer un trabajo de maestra de tiempo completo y ser edil. Porque ¿en qué tiempo iría a las comisiones por ejemplo a trabajar? De noche tenés las sesiones, pero, ¿y las comisiones?, ¿y las visitas a los barrios? Es mentira que podés con todo, no te da el cuerpo, uno también tiene vida, tiene familia. Hoy como están planteadas las cosas, tener un sueldo como edil es ilegal, la Constitución dice que el edil debe ser honorario. Entonces, para que el edil tenga sueldo hay que hacer una reforma de la Constitución, si es así, perfecto, que tenga sueldo. En eso sí estaría de acuerdo. Porque además creo que es mejor eso que tener un sueldo solapado, sorteando la Constitución, haciendo ribetes y tratando de jugar con la Constitución diciendo que es un gasto por secretaría o por esto o por lo otro, como pasa en la Junta Departamental de Montevideo, que terminan cobrando 130.000 pesos los ediles…
-O en Artigas, que rondan los $ 50.000. ¿Por qué pasa eso en otros departamentos?
Sí, cobran por atrás, hacen movimientos solapados, tanto por secretaría, tanto por combustible, por pasajes tanto, por gastos de representación tanto, por viáticos otro tanto…Entonces no se llama sueldo…
-Porque estarían violando la Constitución…
Exactamente, pero es un sueldo solapado. Entonces creo que es mejor transparentar, pero para eso hay que cambiar la Constitución. Pero reitero que a estos ediles que tenemos ahora no les pagaría nada, porque ni legislan ni controlan, que son sus dos funciones. Por ejemplo, no he escuchado llamados a sala al Intendente con las barbaridades que han pasado en Salto.
-También hay ediles trabajando en MIDES, CTM…¿Cómo les da el tiempo entonces?
Porque hacen mal su trabajo. Porque si estás haciendo un trabajo en uno de esos lugares, es mentira que vas a andar recorriendo los barrios atendiendo los problemas de la gente. El edil tiene que ser edil, dedicarse a eso, tener de repente un trabajo que sea muy flexible en el horario. Ahí puede ser, pero si tenés un horario de trabajo que no es flexible, es muy difícil dedicarte a ser edil.
-Sobre los beneficios que reciben, ¿qué piensa?
Si se soluciona con una reforma constitucional y los ediles reciben un sueldo, los beneficios pasan a segundo plano, no deberían existir. Se sustituyen por un sueldo que cada uno utiliza como le parece mejor. En caso que todo siga igual, los beneficios deberían reverse, y analizar qué realmente necesitan. El combustible por ejemplo sí, ni hablar que es necesario para el edil, lo de exoneración de patente es súper cuestionable… Hay mucho para rever. Por eso digo que es mejor transparentar que solapar beneficios.
Mtro. Carlos Martínez: “Creo que sí, que el edil debería recibir un sueldo”
Carlos Martínez (Partido Colorado) fue edil entre los años 2000 a 2005 (gobierno de Malaquina); 2005 a 2010 (gobierno de Fonticiella) y Secretario General de la Junta Departamental entre 2010 y 2015 (gobierno de Coutinho). Dos preguntas muy puntuales le realizó EL PUEBLO para este informe:
-¿Deberían los ediles cobrar un sueldo?
Por la Constitución está establecido que los ediles son honorarios, pero se les ha ido brindando partidas, y esto es diferente en los distintos departamentos, desde Montevideo que es donde los ediles cobran más por diferentes partidas, hasta algunos otros departamentos que son donde cobran menos. Creo que sí, que el edil una vez electo debería recibir un sueldo y eliminarse todos los beneficios que pueda tener. O sea que reciba solamente ese sueldo y eliminar las partidas por combustibles, las partidas para uso de teléfono, la exoneración del pago de patente…Porque aquí hay un gran desfasaje, tenemos ediles con vehículos muy modernos y otros que apenas llegan a una moto, por lo tanto hay una gran diferencia entre lo que cobran unos y otros al exonerárseles la patente.
-¿Sobre esos beneficios qué opinión tiene?
Cuando yo estaba en la Junta los ediles recibían una partida por combustible… Aparte tenían que hacer unas declaraciones juradas, que de repente no eran muy claras, porque para gastar en aquel entonces 200 litros por mes tenían que girar y girar mucho. De todas maneras esa partida no es que el edil titular se haga propio de la misma sino que en la mayoría de los casos la comparten con sus tres ediles suplentes, por lo tanto sería quizás 50 litros por cada uno. Pero hace mucho tiempo, Pepe Vinci había presentado una moción que creo era lo más justo, sacando un cálculo de retirarle los beneficios de patente, combustible y telefonía, a él le daba en aquel entonces (entre 2010 y 2015) unos 10.000 pesos más o menos que podía ser para cada uno de los ediles, y también para los suplentes un poco menos. Por lo tanto yo creo que habría que unificar esto en todo el país y que los ediles cobren un sueldo y se terminen todas esas cosas que se le están dando por secretaría, etc. Creo que cada uno de ellos dedica mucho tiempo al concurrir a las distintas comisiones y plenarios, buscar material, recorrer lugares, y todo eso implica gastos. Quizás algunos podrán tener más facilidad por su trabajo, los empleados públicos cuando tienen reuniones pueden pedir ese día de trabajo, en cambio el que está en lo privado no, entonces todas esas cosas sería mejor que se blanquearan y se hiciera en todo el país de la misma manera.
“No se trabaja sin cobrar y menos con exigencias”,
sostiene Ramón Fonticiella
Intendente durante el período 2005-2010, primer Intendente frenteamplista de Salto, pero además, anteriormente, con experiencia de trabajo como edil, el Maestro Ramón Fonticiella continúa siendo un referente político, un hombre de consulta sobre diferentes temas de la actividad política. Esta vez EL PUEBLO fue en busca de su palabra para consultarle sobre asuntos polémicos que atañen al trabajo de los legisladores departamentales: ¿deben cobrar un sueldo?, ¿qué opina sobre los beneficios que reciben? Lo del título de esta nota es la idea guía que maneja en sus conceptos, cuya parte medular compartimos a continuación:

“Desde hace mucho tiempo se discute si los ediles departamentales deben cobrar salario. Una reforma constitucional que incluía el pago a los curules, no fue aprobada. La situación es desagradable”, comenzaba expresando.
Luego se explayó en estos razonamientos:
“La población vota a los ediles, les hace planteos, les exige soluciones, les reclama estudiar leyes nacionales, normas departamentales, conocer de calles, transportes, impuestos, jubilaciones, primera infancia…todo. Pero que lo hagan en forma voluntaria y honoraria, sin salario declarado. Lo exige la Constitución. Se ha llegado a que varios gobiernos departamentales, ¿o todos?, hayan “inventado” formas de retribuir a los ediles, aún con groseras gambetas a la Constitución. Viáticos, aportes para secretarías, vales para combustibles, patentes gratuitas y seguramente otras formas que no conozco.
Salto ha sido de los últimos departamentos en caer en el pago encubierto a los miembros de su Junta Departamental. Esas retribuciones son relativamente nuevas. Fui diez años edil (dos períodos), pero no existía otra facilidad que tener patente gratuita; no la tuve nunca, pero si lo hubiera hecho sería legal y moralmente correcto. Luego se ha desarrollado una serie de bonificaciones, que considero lesivas éticamente para los legisladores. No hay derecho a que acompañen una “violación” de la Constitución, porque lo justo es que reciban directamente una compensación. La población, el ejecutivo, la prensa exigen trabajo, estudio, dedicación lo que lleva tiempo y energía. ¿Cómo hace una persona para rendir seriamente en su función política, a la vez que trabajar para mantenerse a sí mismo y a su familia? Es injusto.
Tan malo como la retribución encubierta (o peor), es que al edil lo compense el gobierno con un cargo en CTM, por ejemplo, o con un puesto para un familiar en la Intendencia. Todas son soluciones que lesionan la moral personal y la ética colectiva”.
EL MUNDO CAMBIÓ, LA ÉTICA NO
“El mundo en que vivimos es diferente al del siglo pasado -prosiguió el ex Intendente-; en ese entonces, era común que profesionales se dedicaran a la actividad política y empezaran por la Junta, cuya función no les resultaba difícil, pues en general ya tenían formación. La forma de acción de los ediles hacia la población era diferente, con menos presión de parte de las barriadas, que también eran menos pobladas. La vida cambió, ha costado más mantener niveles de supervivencia y la mentalidad “militante” es menos fuerte.
Estoy convencido de que para rendir en la Junta hay que tener tiempo, formación y apoyo técnico. Todo difícil de lograr trabajando por lo menos ocho horas para la propia manutención, y sin respaldos suficientes para profundizar en los temas. Hay legisladores que se las arreglan: trabajan en sus empleos privados, estudian y cumplen como ediles. No todos pueden hacerlo: por falta de tiempo, de preparación previa o porque nadie se lo dijo antes de entrar en la lista de ediles. Ahí pueden empezar los problemas. Los riesgos son múltiples, pero siempre hay un perjudicado: la población. Quien se prepara mal, puede transformarse en un “mano de yeso” que vota lo que le dicen, aunque no sepa por estudio propio de qué se trata. Así por ejemplo la actual Junta votó el cambio de forma de cobro del alumbrado público, con castigo a las economías más débiles. No es el único caso: hay exoneraciones y excepciones que se votan casi a tapas cerradas porque el curul no tiene la autonomía del conocimiento propio.
La fragilidad de estudio por falta de tiempo y preparación, la compensación de la labor como dádiva del caudillo o del partido, deterioran el nivel del edilato, pero sobre todo la solidez de la democracia. La Junta Departamental no es un instrumento ciego del ejecutivo ni un arma contra él. Debe ser la herramienta más popular y confiable al servicio del departamento; nunca un trampolín a un cargo en un organismo público o en la intendencia, ni una bolsa de propinas”, concluyó Fonticiella.
Mantengo firme mi postura de que el edil debe ser honorario”, dice el socialista Juan Pablo Rocca
El joven edil Juan Pablo Rocca, perteneciente al Partido Socialista también dio su opinión ante las consultas de EL PUEBLO respecto a si los ediles deben seguir siendo honorarios o recibir un sueldo, y sobre los beneficios que actualmente reciben. Aquí un resumen de lo expresado:

“Sobre cobrar o no un sueldo mantengo firme mi postura de que el edil debe ser honorario. Si bien existe un tema de interpretación sobre ser honorario o ser oneroso, es decir que implica un gasto al Estado Uruguayo, debemos mantener la esencia de que la Junta Departamental sea la primera escuela de gobierno, de formación política y de cercanía con las demandas de nuestra población. Reafirmo la idea de vocación, que cualquier vecino o vecina, trabajador, estudiante, pueda ser parte y representar sus ideas y las pueda llevar adelante en un sano debate democrático. Nosotros como Partido Socialista, a quien represento, vamos a cumplir el mandato hasta el final del período porque para nosotros es un honor y lo vivimos con mucho compromiso y responsabilidad”.

Rocca además preside la Comisión de Hacienda y Presupuesto y como tal, dijo: «me ha tocado vivir en primera persona la presentación de la propuesta de sueldos y gastos de la Junta Departamental, que se conoce como presupuesto quinquenal, y en esa etapa me tocó presentar la propuesta de la coalición, Partido Colorado y Partido Nacional, así como funcionarios agremiados y no agremiados de la Junta, con la singularidad que la oposición votaba en bloque, entonces implicaba mucho más negociación para la mayoría especial para la aprobación, que es lo que se requiere legalmente. Allí logramos acordar que los beneficios no tuvieran ningún tipo de aumento, se mantuvieran por otros 5 años. Entendemos que no es necesario ese aumento y entendemos que no es una buena señal para la población, sobre todo cuando no podemos negar el descontento y el reclamo porque en nuestro departamento existen enormes dificultades de público conocimiento. A su vez venimos de un período anterior donde la Junta no tuvo la dinámica esperada, como Frente Amplio perdimos la mayoría y cargamos con la responsabilidad de actuar de forma moderada y dando una buena señal. Un detalle no menor, que nunca se nombra públicamente, es que se vio en la práctica que no todos los ediles insumen ese egreso total de beneficios y que en términos de gastos hemos sido una Junta Departamental muy austera en comparación con otras etapas”.

Nacionalistas con visiones diferentes:
Para el edil Eduardo Casaballe se debe recibir un sueldo, para el ex edil Atkinson Jorge no
Así reflexionaba el edil Eduardo Casaballe ante la consulta de este diario sobre el tema del informe de hoy:
“Personalmente creo que se debería cobrar un sueldo acorde a la función, debido a que se es el primer y más cercano representante político que el vecino consulta, conoce y además está compenetrado con los temas de la comunidad. Los beneficios, los cuales como la nafta, que se dividan y se compartan entre titulares y suplentes. Los suplentes somos en la mayoría de las veces que presentamos temas, concurrimos a Sesiones del Cuerpo y Comisiones. Toda actividad debe ser remunerada, en tanto sea un ingreso único, porque a muchos nos tocó no tener trabajo al momento y durante el transcurso de la legislatura”.
Por su parte, Atkinson Jorge, también del Partido Nacional, que fuera edil durante tres períodos consecutivos (de 1989 al 2005) piensa lo siguiente:
“La Constitución es clara. Los ediles son honorarios, cuando se postulan como tal lo saben. Si quieren tener beneficios, que reformen la Constitución, cosa que ya se hizo y la población le dijo no. El Estado está demasiado grande como para se siga sumando cosas. Sé que muchos reciben compensaciones, pero eso está mal. Se hace porque siempre se hizo, pero no quiere decir que esté bien. Los ediles de Montevideo reciben $18.000 más otras compensaciones como gastos de secretaría. El que no quiera trabajar en forma honoraria, que ni integre lista”.