Hoy viernes, a la hora 18:30, quedará inaugurada en el local de APLAS (19 de Abril y Julio Delgado) la muestra plástica titulada «M», de Ana Luisa Testa, la que permanecerá abierta al público hasta el 15 de agosto.
La artista, que mantiene desde hace varios años un fuerte vínculo con APLAS y que anteriormente ya ha realizado otras exposiciones tanto en forma individual como colectiva, dijo a EL PUEBLO que «M es de Mujer, y esa letra está relacionada con muchas palabras referidas a la mujer, como por ejemplo Madre, Milagro, Merecer, Misericordia, y otras que no son tan lindas y también están referidas a la mujer, como Maltrato, Mutilar, Mofa, Muerte, Martirio». As´que esta muestra, comentó, «pretende valorar a las mujeres, no ponerse en contra del sexo opesto sino que logremos lo justo, la igualdad, y reivindicar a la mujer desde el punto de vista filosófico, jurídico, económico…De alguna manera se podría decir que es un homenaje a las mujeres, aunque hay distintas miradas».

Por otra parte, explicó que «todas las obras son hechas en collage o en técnicas combinadas, donde se utiliza el collage, la tiza pastel, o el óleo, o la acuarela. Más que nada hay collage, pero hecho con papeles que yo misma voy haciendo, imprimiéndolo, buscando distintas texturas…El público también se va a encontrar con intervenciones d eobras clásicas, como La Gioconda, El nacimiento de Venus, de Sandro Boticcelli, la Libertad, de Delacroix, resaltando su vigencia…».
Cabe añadir que la muestra tiene como curador al docente y artista Óscar Larroca, quien ha escrito: «En ese recorrido de conceptos que van desde la misericordia hasta el martirio y la muerte, Ana Luisa Testa nos ofrece una selección de obras preñadas de metáforas a propósito de su sentir, como mujer y como artista. Se puede apreciar en los trabajos de esta exposición una síntesis de un lenguaje que, al día de hoy, la identifica claramente. Una “figuración gestual” que arropa a las mujeres homenajeadas (desde cholas bolivianas hasta actrices reconocidas) y una sensualidad a medio camino entre lo descriptivo y lo expresionista, como lo testimonian su serie de “cogotudos”. Todas las obras, trabajadas tanto con pasteles y/ o con collage, están construidas con la misma impronta que caracteriza a su autora: dinámicas, y densas; entre el control de la composición y el ligero descuido. Observando lo prolífico de su producción y la rapidez con que trabaja, se hace interesante pensar hasta qué grado podría derivar su obra en una suerte de expresionismo abstracto. Tal vez este no sea el caso, y tampoco el camino elegido, puesto que, más allá de su libertad expresiva, Ana Luisa Testa tiene muy claro el rumbo a seguir: continuar con un lenguaje personal y con una figuración despojada de etiquetas y apriorismos. Sin caer en el atajo fácil y acrítico de decir que varias de estas obras se hallan en permanente proceso de elaboración (work in progress) y que algunas otras se pueden etiquetar dentro de cual o tal corriente; en todos los casos la travesía que comienza para su autora es abiertamente franca y arriesgada, lo que habla del compromiso asumido en la apuesta por la concreción de una “M” singular».