Miércoles 9 con destino a Asamblea Extraordinaria
Una hora y media de sesión ayer a la noche en el Consejo Superior de la Liga Salteña de Fútbol, porque en definitiva las razones deportivas y económicas enmarcadas en el futuro inmediato, son parte de la discusión, de la búsqueda y en definitiva, cómo equilibrar las finanzas en tiempos de malaria.
El hecho es que se sumó una nota firmada por más de veinte representantes de clubes, en que se solicita una asamblea extraordinaria, a los efectos de enfocar cuatro aspectos sustanciales: 1) Exonerar a los clubes el pago de la inscripción para afrontar la temporada 2021.
2) Que los pases en préstamos gestionados en el 2020, se prolonguen en el año que vendrá, teniendo en cuenta que el fútbol de Primera División permaneció al margen.
3) Amnistía general para quienes tengan una sanción de hasta seis fechas, ya sea jugadores, integrantes de cuerpos técnicos o directivos.
4) Facultar a las Divisionales «B» y «C» para que inicien sus torneos en el momento que lo estimen propicio, sin predeterminaciones en esa dirección.
EL PAGAR O NO PAGAR
Sin dudas que la cuestión más abarcadora fue la relativa al pago no pago de la inscripción de clubes para el 2021. Se especificó una vez más que el «colchón económico» que dispone la Liga Salteña de Fútbol en los meses en que no se desarrolla la actividad local, es el pago de la inscripción de clubes, la recaudación en la liguilla y el perìodo de pases.
En este año que va agonizando sin liguilla y con un periodo de pases que será limitado «y si no se efectiviza el pago por concepto de inscripción, cómo sostener el funcionamiento de la Liga en los meses de enero, febrero y marzo».
Por eso se tentó en el Consejo, «concientizar» que si se deja sin efecto la cuota de registro, «se hará agua por todos lados».
La asamblea fue votada. Se desarrollará.
Pero se pretende que ese punto sea rechazado. El fin es que la Liga «tenga un colchón económico». Al decir del delegado y presidente de Salto Uruguay, Daniel Schiavi, «este es un toro mucho más grande para agarrarlo», aludiendo a las complejidades económicas que involucran a todos los clubes.
Ya en la pasada sesión se admitió que «se nos cayeron todos los rubros».
CON RUMBO A LA ASAMBLEA
De lo que no hay dudas es que el caudal de incertidumbre permanece vigente con respecto al año próximo. La prolongación de la pandemia, el no saber cuál será «el estado de situación en marzo o abril del año que viene», mientras se manejó una opción de futuro: golpear puertas y sensibilizar a quienes puedan aportar colaboración implícita a la Liga, para que la actividad sea posible.
A su vez se manejaron proyecciones respecto al montaje de los espectáculos, mermar los presupuestos, considerando que el año pasado por cancha, la venta de entradas no debía limitarse a menos de 400 para no resignar dinero.
De hecho «desde todos los clubes terminamos pagando para jugar».
La asamblea extraordinaria se pactó para el miércoles 9 de diciembre a las 20 horas. Los delegados deberán munirse del correspondiente poder. La asamblea, una manera de ir plantando, más allá del reinado de la intriga.
