El tiempo evidentemente “está loco”, el miércoles fue un día característico de primavera, con una temperatura quizá un poco más elevada que lo normal para esta estación del año.
En la calle, la gente vestía prendas de manga larga, corta, musculosas, “ya no se sabe ni cómo vestirse se escuchó decir”.
Una gran diversidad de prendas a la hora de vestirse, botas, sandalias, zapatos. Los helados, las botellas de agua o refrescos se hicieron notar.
El helado se ha vuelto un producto de todo el año, ya no hace falta la estación de verano para poder acercarse a las heladerías.
Los que tienen algunos años podrán recordar que inclusive la heladería Nevada cerraba en el invierno.
Hoy es un postre atemporal, estando también en las góndolas de los supermercados, todo el año, en una amplia variedad.
Ayer amaneció el día con una temperatura mucho más baja, volviendo a abrigarse.
Los motonetistas volvieron a los guantes, gorros y camperones, y a la tarde llegó la lluvia.