back to top
13.3 C
Salto
domingo, septiembre 7, 2025

EL PUEBLO presenta La entrevista escrita más larga del mundo Parte 18 con Salomón Reyes

- espacio publicitario -
Diario EL PUEBLO digital
Enlace para compartir: https://elpueblodigital.uy/4vks

“El día que quise bailar”

“Durante un tiempo largo me dediqué al teatro físico ya saben… esos espectáculos que combinan escenas teatrales con diseños físicos inexplicables. Muy locos pero bellos” – nos revela Salomón.
Así que pasar de esa extraña disciplina a ser bailarín a nuestro protagonista no le significaba un acto descabellado.
“Empecé por entrenar en una de las compañías de danza contemporánea más importantes. En mi primera clase, el director-coreógrafo me recibió con un gesto de incredulidad y autosuficiencia diciéndole a todos los bailarines =oque tomaban la clase: “Dice que viene a entrenar”. La frase no me amilanó pero acá entre nos, el entrenamiento no fue nada fácil y además me hacían falta varios años previos”.
Luego de vivir esas experiencias tan desopilantes como intensas, Salomón aún guarda en su mente la frase que compartió con él un bailarín y coreógrafo genial “Para ser bailarín te lo tienes que creer”.

  • ¿Cómo vivió esos primeros tiempos de bailarín?
    -”Al poco tiempo finalmente conseguí mi objetivo de bailar sobre un escenario aunque con franqueza era el peor de todos. Parecía una araña fumigada. Además el gusto me duró poco porque en una de esas funciones me lesioné la rodilla y ahí terminó mi atropellada y breve carrera de bailarín.
    Después intenté ser coreógrafo, una actividad que me permitía al menos, no exponer la rodilla. Hice algunas cosas extravagantes y tontas pero muy divertidas.
    En realidad la danza nunca me abandonó y siempre que puedo, meto algún diseño coreográfico para no olvidar los tiempos en que quise bailar y fracasé.
    La danza me ha acompañado desde siempre.
    Mis primeros impulsos y mis motivaciones nacieron a partir de mi actuación como receptor abierto en un equipo de béisbol.
    Un día leyendo me enteré que la danza danza clásica optimizaba las capacidades físicas para ser un buen jugador.
    El receptor abierto tiene que tener elasticidad, saltar en las alturas entre otras cualidades.
    Como no disponía de dinero para ir a un instituto privado a tomar clases particulares en una escuela profesional, me anoté para participar de unos talleres de danza gratuitos promovidos por el gobierno provincial mexicano.
    Yo ya traía como una sensibilidad para el tema corporal así que esté cuando empecé hacer teatro mis espectáculos empezaron a tener esa impronta corporal física.
    Con el tiempo me percaté que era toda una tendencia en el teatro.
    Muy pronto empecé a trabajar en obras que exigían un poco trabajo corporal y como era muy bueno en tema de rítmica y coordinación, me fue muy bien.
    Empecé a entrenar obviamente sabiendo que yo tenía una desventaja frente a los que sí eran bailarines…. pues yo me esforzaba el doble… las cosas no me salían demasiado bien pero insistía.
    Marco Antonio finalmente me invitó a hacer un montaje de danza que se llamaba El Quijote … una versión del Quijote en danza contemporánea.
    Me tocó representar a Sancho…. un personaje divertido… finalmente logré bailar diversas coreografías con un nivel técnico bastante alto”
    Logré cosechar muy buenas amistades son especiales para mí y me dieron como una impronta. Finalmente hicimos una gran gira nacional… con ese espectáculo nos iba muy bien, empero yo tenía una antigua lesión en la rodilla que me había hecho jugando al basket, tiempo atrás. La rodilla me falló en medio de una función y lastimosamente tuve que ser intervenido quirúrgicamente.
    Ya luego no volví a tener el nivel para bailar… que en realidad nunca lo tuve (risas)”.
  • ¿Qué hizo después de ver coartada su carrera como bailarín?
    Hice algunos espectáculos-… por ejemplo recuerdo que se me dio la oportunidad de viajar con uno de ellos por varios países .
    Nos gustaba mucho porque la danza danza al aire libre se hacía utilizando un automóvil y era muy divertido… hicimos grandes cosas hasta se montaron nuevos grupos.
    Cuando llegué por primera vez a Uruguay participé de un taller de videodanza.. La decepción fue muy grande en este sentido al llegar Salto pues no pude encontrar intérpretes para hacer este tipo de espectáculos.
    Entonces me he tenido que guardar mis ideas locas y extravagantes”.
Enlace para compartir: https://elpueblodigital.uy/4vks
- espacio publicitario -Bloom