A ver, siempre se habla del poder sanador de la escritura, pero en estos tiempos, y ante escribana pública , mi querida amiga Cristina, puedo jurar que la lectura también te salva. No siempre es fácil elegir qué libro leer entre los que compro, me regalan o me prestan. ¡Es un lío bárbaro! Pero en mi experiencia, los podcasts y newsletters literarios son clave para orientarme en esta búsqueda infinita.
Por eso, julio fue un mes de leer mucho, muchísimo. Fue la mejor manera de sacarme la toxicidad de encima y llenarme de ficción. Cuanto peor la pasaba, más leía. Literal.
Los amores equivocados – Cristina Peri Rossi
“Si los amores suelen ser equivocados, amar no es equivocado”, dice la gran Cristina Peri Rossi en Los amores equivocados, y esa frase se queda dando vueltas en tu cabeza mientras lees el libro. Peri Rossi no solo te habla de relaciones fallidas, sino que te sumerge en todo el caos, el drama y la belleza de esos vínculos que, aunque no terminan bien, siguen siendo necesarios, porque el simple hecho de amar ya es un acto de valentía.
Este es el segundo libro que leo de ella y, la verdad, me dejó sin palabras. Lo que más me impactó es cómo aborda las relaciones modernas con una naturalidad y una sinceridad que, por momentos, te hacen sentir que ya está todo dicho sobre el tema. Peri Rossi desnuda las relaciones humanas, las vuelve tan reales y cercanas que podés verte reflejado, o reconocer alguna historia que viviste o escuchaste.
Ahora, hablemos de los momentos eróticos… ¡Qué bien narrados! Los describe con tanta soltura que no cae en lo vulgar ni en lo innecesario. Es todo lo contrario: cada escena tiene un toque de sutileza y sensualidad que las hace exquisitos. Y es increíble cómo, a través de lo erótico, también va explorando los sentimientos de los personajes. Nada está puesto porque sí, todo tiene un sentido, una intención, y se nota.
El estilo de Peri Rossi es tan atrapante. Escribe con una simplicidad que no es para nada simple. Te va llevando con una prosa ágil, directa, pero llena de ironía y picardía. Por momentos, me reía en voz alta, como si estuviera charlando con una amiga. Hay algo en su forma de contar que reconforta, como si estuvieras en buenas manos, sabiendo que cada página te va a dar algo valioso. Las carcajadas que me sacaba eran como pequeñas dosis de sanación para el alma. No te la quiero vender.
Peri Rossi es un viaje de ida. Después de leerla, es imposible no querer seguir explorando su obra. Es una escritora que se te mete bajo la piel, te hace reflexionar, te hace reír, te incomoda y te sacude. Definitivamente hay mucho para descubrir en ella, y no dudo en recomendarla a cualquiera que esté buscando una lectura profunda pero accesible, con ese toque justo de humor y sensualidad.
Si no leíste nada de ella todavía, Los amores equivocados es una excelente puerta de entrada a su universo.
Fortuna – Hernán Díaz
Fortuna es una novela del argentino Hernán Díaz, que se llevó el Pulitzer de ficción, nada menos. La historia se divide en cuatro partes y te mete de lleno en la construcción del capitalismo financiero. Arranca entre Nueva York y Europa, pero lo interesante es que va directo al corazón de Wall Street, donde las respuestas son solo más preguntas (¡bien ahí, capitalismo!).
El primer tramo, Obligaciones de Harold Vanner, cuenta la historia de cómo Benjamin Rask se convierte en un magnate financiero, tomando la fortuna de su padre, que venía del tabaco, y llevándola a otro nivel.
En la segunda parte, Mi vida, Andrew Bevel (basado en Rask) intenta limpiar su nombre y aclarar que su riqueza viene del mercado libre y su habilidad para negociar. Lo interesante es que este libro, lleno de tachones, es la autobiografía del personaje real que inspiró a Vanner. ¡Todo un juego de espejos!
La tercera parte, Recuerdos de unas memorias de Ida Partenza, la ghost writer de Bevel, ya siendo grande, descubre el diario de la esposa de Rask, lo que le da otra vuelta de tuerca a la historia.
Este libro es como una matrioshka: una historia dentro de otra. Todo gira en torno al dinero como eje del capitalismo, y Hernán Díaz no tiene miedo de meterle una crítica feroz.
Una verdadera joya. Imperdible.
