La hora en que la Comisión Directiva de Gladiador resolvió la Dirección Técnica. Con dos nombres sobre la mesa: o la permanencia de Rony Costa en la función o el surgimiento del nuevo ciclo a partir de Roberto Mezza. No han faltado quienes lanzaron la estocada de la crítica, «porque se trató de un manoseo» de nombres. Sucede que las dos opciones ganaron la opinión pública a través de los medios y de las redes sociales.Eran los dos nombres en danza y por lo tanto se trató de una información que fluyó y no de una especulación, tanto a cuenta del periodismo como del hincha de Gladiador o simplemente de quienes son parte del fútbol y sienten que exponer un pensamiento no es es delito.

El hecho es concreto. No es del caso invocar el término «manoseo», cuando se trata de hombres públicos. Tanto Rony Guzmán Costa como Roberto María Mezza lo son y ellos lo saben. Lo sucedido en Gladiador, parte misma de un universo que se asocia al fútbol: nombres que van y que vienen. Si no fuese así, el 80% de lo que se sabe como certeza o posibilidad, no alcanzaría consideración pública ni proyección hacia la gente, que en definitiva es quien consume lo que es información o noticia.De lo que no hay dudas es que tanto Rony como Roberto, bien que entienden de qué se tratan situaciones como estas. No les falta clase como deportistas y menos condición humana. Cuando se sostienen estos dos atributos, la lógica del entendimiento es cosa concreta. Lo es. -ELEAZAR JOSÉ SILVA-