Pedro Dall´oglio – Presidente del Club de Leones Salto Ayuí
EL PUEBLO dialogó con Pedro Dall´oglio, Presidente del Club de Leones Salto Ayuí, quien destacó las obras que dicha institución ha venido llevando a cabo desde hace tiempo y en el último período en que le ha tocado dirigirla.
El Club de Leones es una de las instituciones sociales de mayor trayectoria en el mundo y en Uruguay, ¿cuántos años tiene el club que preside?
El Club de Leones Salto Ayuí, hace 37 años que trabaja con el objetivo de contagiar el espíritu leonístico en la sociedad.
¿Cuáles han sido las principales actividades desarrolladas por el Club en este período 2017 – 2018, que culmina el próximo mes?
En este período llevamos adelante actividades que siempre están presentes, como el préstamo de sillas de ruedas para aquellas personas que no pueden acceder a una y cuya adquisición le facilita muchísimo la vida y las pesquisas visuales. También, ayudamos a los damnificados por las inundaciones; realizamos un nuevo año de la obra “Alimentación Saludable”; inauguramos una cancha de fútbol en una capilla del Cerro; la visita a los abuelos en su día en el Hogar; los Bonos de Colaboración, que salen todos los años y se sortean automóviles, con cuya recaudación se compran sillas de ruedas, etc. Por supuesto que no podemos olvidarnos del programa “Leones Educando”, que se lleva a cabo en las escuelas, enfocado a la prevención ante la droga, la educación sexual, etc.; programa que aún, lamentablemente, no ha sido aprobado por ANEP. Las obras en sí, siempre apuntan a más; sucede que hay pequeñas necesidades, que para muchos son grandes, que también deben de ser atendidas. Por otra parte, como lo manifesté, falta gente y obviamente dinero para poder realizarse obras de gran envergadura. De todas formas, toda ayuda que podamos brindar, sirve, por más que se considere pequeña. El Club de Leones apunta siempre a la sociedad.
¿Cómo se plantean dichas necesidades y la determinación de ayudar?
Las necesidades siempre surgen; siempre se están presentando preocupaciones y entre los miembros del Club, se decide la prioridad y las posibilidades que tenemos en ayudar. A veces, se presentan proyectos para elaborar, y se estudian las posibilidades. Por ejemplo, en estos momentos se presentó la posibilidad de fabricar calentadores de agua a través de paneles solares de manera económica, para localidades del interior del departamento, lo cual se está analizando, sus costos, modo de hacerlos y que sean accesibles a los interesados, ayudando, sin lugar a dudas, de realizarse, a muchas personas.
¿La participación ha ido en aumento o al revés?
El Club, en cuanto a la participación de la gente, está complicado. El compromiso ya no es el mismo, y se entiende porque el tiempo es carísimo, y la gente tiene como prioridad el trabajo. A lo que apunta el Club, es a tener muchas manos y que dirija poca gente; o sea, tener muchos Leones a los que sabemos que podemos encomendarles tal o cual tarea y que la van a realizar. Si se quiere tener un club que funcione, hoy en día, hay que apuntar a eso. La Directiva, debe de saber con cuántos Leones se cuenta y fijarse a cuál o cuáles se le designa una tarea específica, en el entendido de que disponen de tiempo para llevarla adelante.
¿Más que de una falta de tiempo, puede catalogarse como una falta de compromiso con lo social?
Me parece que va de la mano; aunque, también es cierto que, no es que la gente no quiera ayudar, dar una mano, sino que muchas veces toman un compromiso, y luego se dan cuenta de que se les va a complicar y no podrán cumplir, porque la prioridad es el trabajo, que no es otra cosa que la vida de una persona. Más hoy en día donde lo económico tiene un lugar sumamente imprescindible para la vida misma. También el quitarle tiempo a la familia, porque de algún lado hay que adquirirlo, si el resto se está trabajando; y eso, muchas veces pesa. Por eso digo, no es tanto por falta de compromiso, que lo hay; el tiempo influye y mucho en la poca cantidad de miembros.
