back to top
domingo, 8 de junio de 2025
10.5 C
Salto

El asesinato de una adolescente resucita el debate de la inseguridad en Argentina

- espacio publicitario -
Diario EL PUEBLO digital
Enlace para compartir: https://elpueblodigital.uy/x1cw
El padre de la joven hizo un llamamiento para «involucrarse más en la realidad del país y ser responsables a la hora de votar».
Ángeles Rawson tenía 16 años y vivía en el barrio porteño de Palermo, de clase media. Había obtenido recientemente las mejores calificaciones de su instituto. El lunes por la mañana acudió a una clase de educación física. Al salir le dijo a unas compañeras: “Voy a comer y vuelvo”. Pero nunca llegó a su casa. A las 21.15 su madre, Jimena Aduriz, la llamó al teléfono móvil y nadie le contestó. A las 21.47 volvió a llamar, pero alguien apagó el aparato. A la mañana siguiente su madre emprendió una campaña por las redes sociales: “Por favor, mi hija Ángeles Mumi Rawson está desaparecida desde ayer. (…) Les pido que por favor pasen esta foto”. La búsqueda duró pocas horas. El cadáver de Ángeles apareció el martes a las 11.30 de la mañana envuelto en una bolsa de basura, con una soga al cuello, su uniforme deportivo del colegio Virgen del Valle, las piernas atadas y otra bolsa en la cabeza. La encontraron en la cinta de separación manual de residuos en una planta situada en el barrio de José León Suárez, en el conurbano bonaerense. La autopsia confirmó que murió estrangulada, aunque en los primeros informes no se pudo confirmar si sufrió agresiones sexuales.
El caso ha vuelto a resucitar el problema de la inseguridad en Argentina, en pleno año electoral, a dos meses de las elecciones primarias del 11 de agosto y a cuatro de las legislativas del 27 de octubre. El martes por la noche, María Inés, abuela de Ángeles, declaró ante las cámaras: «Nos merecemos un país donde no hayan más Ángeles. Les pido, por favor, que reaccionemos». El miércoles por la mañana, Franklin Rawson, el padre de Ángeles, divorciado de Jimena Aduriz, señaló en una entrevista radiofónica: “Hay que recordar todo esto a la hora de votar. (…) Lo que pasó no tiene solución, lo que pretendo es que haya justicia y se termine esto de la inseguridad, porque no se puede seguir viviendo así».

El padre de la joven hizo un llamamiento para «involucrarse más en la realidad del país y ser responsables a la hora de votar».

Ángeles Rawson tenía 16 años y vivía en el barrio porteño de Palermo, de clase media. Había obtenido recientemente las mejores calificaciones de su instituto. El lunes por la mañana acudió a una clase de educación física. Al salir le dijo a unas compañeras: “Voy a comer y vuelvo”. Pero nunca llegó a su casa. A las 21.15 su madre, Jimena Aduriz, la llamó al teléfono móvil y nadie le contestó. A las 21.47 volvió a llamar, pero alguien apagó el aparato. A la mañana siguiente su madre emprendió una campaña por las redes sociales: “Por favor, mi hija Ángeles Mumi Rawson está desaparecida desde ayer. (…) Les pido que por favor pasen esta foto”. La búsqueda duró pocas horas. El cadáver de Ángeles apareció el martes a las 11.30 de la mañana envuelto en una bolsa de basura, con una soga al cuello, su uniforme deportivo del colegio Virgen del Valle, las piernas atadas y otra bolsa en la cabeza. La encontraron en la cinta de separación manual de residuos en una planta situada en el barrio de José León Suárez, en el conurbano bonaerense. La autopsia confirmó que murió estrangulada, aunque en los primeros informes no se pudo confirmar si sufrió agresiones sexuales.

El caso ha vuelto a resucitar el problema de la inseguridad en Argentina, en pleno año electoral, a dos meses de las elecciones primarias del 11 de agosto y a cuatro de las legislativas del 27 de octubre. El martes por la noche, María Inés, abuela de Ángeles, declaró ante las cámaras: «Nos merecemos un país donde no hayan más Ángeles. Les pido, por favor, que reaccionemos». El miércoles por la mañana, Franklin Rawson, el padre de Ángeles, divorciado de Jimena Aduriz, señaló en una entrevista radiofónica: “Hay que recordar todo esto a la hora de votar. (…) Lo que pasó no tiene solución, lo que pretendo es que haya justicia y se termine esto de la inseguridad, porque no se puede seguir viviendo así».

Enlace para compartir: https://elpueblodigital.uy/x1cw