Será el próximo lunes, cuando en el Consejo Superior, ingrese la nota de renuncia de DEOLINDO MIQUELARENA, plasmándose su desvinculación del Colegio de Jueces de la Liga Salteña de Fútbol.
La disconformidad del “Chato” (inolvidable árbitro de los años 80 y 90), está planteada en no pocas áreas, todo a raíz claro está, de los últimos insucesos en el fútbol salteño. Ocurre que para el Colegio de Jueces no es una misión accesible, desde el momento que debe designar funcionarios sin tener pleno conocimiento sobre aptitudes actuales o antecedentes.
CUESTION DE
TERREMOTO
Lo cierto es que Deolindo Miquelarena ya impuso de la decisión al presidente del Colegio, Comisario Raúl Couto, en tanto ya está en conocimiento de lo resuelto por el “Chato”, el propio presidente de la Liga Salteña de Fútbol, Juan Kutscher.
Como en el año 2007 y sobre el final de temporada, en buen romance el terremoto también se origina en el Colegio de Jueces. Aquella vez con la renuncia masiva y en especial alguien que se alejó y al fútbol le dolió: José Luis Sequeira. Todo apunta a que la renuncia de Miquelarena tiene carácter indeclinable. Después de todo, el ex juez de fútbol, no es de lo que “se va al mazo para barajar de nuevo”.
