Los 99 diputados que tiene el sistema parlamentario uruguayo se llevan casi 700 mil dólares por mes. Pero no es todo, los 30 senadores se llevan otros 600 mil.
Cuando se discutió esto en el Parlamento se argumentó que en caso contrario volverían a ocupar las bancas los grandes hacendados, los capitalistas que tenían suculentos depósitos bancarios y los grandes empresarios, como ha sucedido en épocas pasadas. Lo que nadie se dice es que a pesar de todos los recortes aprobados, los legisladores que caducan en sus cargos o renuncian a ellos, tienen el beneficio de un año de subsidio con el 85 por ciento de su últimos sueldo. El beneficio alcanza al presidente de la República, al vice presidente, los subsecretarios, legisladores, Fiscal de Corte, directores de entes y servicios descentralizados, director y sub director de OPP, directores de servicios descentralizados, secretario y prosecretario de presidencia, directores de la Corte Electoral y Suprema Corte de Justicia, del Tribunal de Cuentas y del Tribunal de lo Contencioso Administrativo. Cuando enfocamos este tema no podemos olvidar que merecen la salvedad, el senador frenteamplista Ernesto Agazzi, el ex ministro de economía, Alejandro Atchugarry y los ex legisladores frenteamplistas Marcos Carámbula, Eduardo Chiflet y el actual presidente de la República tras su primer mandato, Tabaré Vázquez.
Honestamente nos rechina. No parece que los casi 100 mil dólares por año que cobra un legislador. Esto es los más de 400 mil dólares en lo que dura el período, les fuera suficiente para prever las posibles dificultades que les puedan ocasionar el desentenderse de otras actividades, si es que realmente dejan todo de lado para dedicarse a la función.
¿Qué pensarán entonces con el menguado seguro de paro de la actividad privada?. Los trabajadores ganan un 60 por ciento durante seis meses y el sueldo mínimo apenas si llega a los 15 mil pesos (unos 400 dólares mensuales, mil veces menos de lo que gana un legislador en el período). Vale decir que el subsidio a un legislador es algo así como 18 veces superior a un salario mínimo.
Uruguay es el país de América Latina que tiene más legisladores y más gasta en este aspecto. Prueba de que es esta una actividad muy rentable es que hay varias figuras que hace bastante tiempo que ocupan sus bancas. Es efectivamente un tema a analizar, porque hasta el momento todos los intentos por reducir la cantidad de parlamentario en el país han fracasado. Por auténtica defensa de la democracia o pura demagogia, pero así ha sido
A.R.D.
De sueldos y privilegios en las bancas
Enlace para compartir: https://elpueblodigital.uy/ny4b
Enlace para compartir: https://elpueblodigital.uy/ny4b