En entrevista con EL PUEBLO, Karen Sass, Directora de Discapacidad del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES), resaltó la reciente inauguración del primer call center en Lengua de Señas Uruguaya (LSU). Este servicio marca un avance importante en accesibilidad, permitiendo que personas sordas puedan realizar trámites y obtener información de manera autónoma mediante videollamadas con intérpretes.
La Directora calificó esta implementación como un paso esencial hacia la inclusión: “La creación de este call center no solo responde a una necesidad histórica de la comunidad sorda, sino que representa un derecho fundamental de acceso a la información y a la interacción directa con el Estado”. La iniciativa, fruto de un trabajo colaborativo entre MIDES y la comunidad sorda, responde a la demanda de un acceso independiente a los servicios públicos.
Operativo en ANTEL, UTE y BPS
El servicio ya está disponible en organismos como UTE, ANTEL y el Banco de Previsión Social (BPS) en todo el país. Funciona triangulando la comunicación entre el intérprete, el funcionario y la persona sorda, buscando unificar un sistema eficiente y de calidad. Sass explicó que el objetivo es ofrecer un servicio inclusivo y directo: “Queremos que los mismos funcionarios que atienden al público puedan también interactuar con personas sordas, con el apoyo de un intérprete, reflejando un cambio en la atención a la discapacidad”.
Este sistema no busca crear servicios exclusivos, sino integrar a las personas sordas dentro del sistema de atención general. A futuro, se espera que el servicio esté disponible en todas las comisarías y dispositivos móviles del Ministerio del Interior, facilitando el acceso en cualquier punto del país.
Funcionamiento y horarios
El call center opera de 09:00 a 17:00 horas en esta primera fase, con planes de expansión a un servicio nacional 24/7. Las oficinas públicas que implementen el sistema estarán señalizadas para informar de la disponibilidad de intérpretes. Al iniciar la videollamada, el intérprete conecta a la persona sorda con el funcionario adecuado, asegurando una comunicación fluida.
Este proyecto beneficiará a unas 30,000 personas con discapacidad auditiva en Uruguay, fortaleciendo el compromiso de MIDES con la equidad y accesibilidad.
