Con motivo de estudiar para mejorar el inglés y ahorrar dinero, Bruno y Lucia decidieron emprender ´vuelo´ hacía Nueva Zelanda. Estudiando las posibilidades que este país brinda a los extranjeros que deciden residir y trabajar, fue el mejor destino que encontró esta pareja de jóvenes salteños, basándose en las experiencias de otros pares de nuestra ciudad y también compañeros de facultad que se fueron antes.

Bruno, dedicado a la venta de software con sus principales clientes en Estados Unidos, debía mejorar su lengua extranjera para obtener mayores ventas. Lucia, Licenciada en Comunicación buscando nuevos ´horizontes´, deciden emprender el viaje hacia otro continente en pos de más aprendizaje y otras realidades.
Son muchos los jóvenes que van a Oceanía a realizar pasantías, en el caso de Nueva Zelanda muchos llegan directo al trabajo en tambos, pero esta pareja de salteños se encontró con otra realidad para ellos, otros desafíos.
Bruno y su llegada a Nueva Zelanda
“Cuando tomamos la decisión yo tenía 28 años y Lucia 23, muchos conocidos que se fueron antes nos motivaron a ir, el sistema que tiene Nueva Zelanda; Working Holiday Visa; te permite trabajar y residir por un año en el país, lo mismo pasa en Australia.
Una vez que llegamos sinceramente no lo pasamos muy bien, no estábamos en un lugar donde dijéramos ´es acá donde debemos estar´. Luego nos mudamos al sur y ahí cambió muchísimo la situación para nosotros.”
Lucía una vez recibida decide emprender el viaje
“Después de recibirme en Montevideo, enseguida ingresé en un trabajo que no me pagaban mucho, jóvenes que estaban cerca de nosotros se tomaban el año sabático y se iban a otros países, entre ellos Nueva Zelanda.
Cuando llegamos a Auckland, nos encontramos como perdidos, no era lo que habíamos ido a ´buscar´, estaba repleto de asiáticos, era como estar en China, todo el tiempo te los cruzabas. Los primeros cuatro días que estuvimos la ´sufrimos´.
El curso que había comprado Bruno era en la ciudad de Queestown, al otro lado de Nueva Zelanda o sea bien al sur, allá salimos y nos fuimos, allí cambió totalmente nuestra realidad.”
La adquisición del auto por correo, los paisajes y la vida de un país moderno
“El cambio de vida en la ciudad que decidimos vivir comienza a originarse cuando también compramos un auto, lo curioso es como lo hicimos; pagamos nueve dólares por el correo y en muy poquito tiempo teníamos el vehículo con nosotros: sin escribanos de por medio, sin burocracia, sin tramites y sin demoras.
Nueva Zelanda es un país que tiene todos los climas, desde las montañas nevadas hasta las playas más hermosas. Todo es limpio, todo es una belleza y no hay casi lugares donde digas que están en mal estado. Es un país donde todo funciona bien, ellos lo hacen todo muy sencillo y todo funciona bien.
Cuando recorrimos el país nos dimos cuenta que las carreteras están en perfectas condiciones no tienen un solo peaje, son una cultura que se dedica al cuidado de su ciudad. Nosotros casi que no usamos llaves para cerrar nuestra casa, nos es necesario, hay mucha seguridad. En las ciudades más grandes cambia un poco la realidad, pero de todas maneras es muy distinto a lo que sucede por acá.
Los trabajos de cada uno, el nacimiento de Elena; su bebe
Bruno cuenta acerca de su primer empleo; lejos de lo que fue a estudiar, pero con un futuro prometedor.
“El primer trabajo es en una casa bastante grande, donde debía hacer todo tipo de tareas, la dueña de la casa me pide algo específico donde lo hice bien. Pues esta señora resultó ser dueña de una empresa de construcción, creo que el compromiso con el que hice mi trabajo ayudó a que me contratara.
Hice un curso de carpintería de inmediato, eso me habilitó a formar mi propia empresa, hoy cuento con mis propias herramientas y eso me da libertad para trabajar, antes habíamos logrado la residencia en el país, eso nos ayudó un montón.
Lucia y sus trabajos; niñera, recepcionista, guía y chofer
“Para empezar, contábamos con un inglés muy básico, mi primer trabajo fue en un hotel durante seis meses realizando tarea de limpiezas. También fui niñera por un año, cuidaba tres chicos.
Mejorando mi idioma (ingles), volví a trabajar en un hotel, pero en la parte de recepción esta vez. Era como un hotel boutique, no solamente era trabajo de recepción, sino que se servíamos el desayuno al huésped.
En el mismo rubro, comencé a manejar un bus donde hacia distintos paseos uno de ellos tour por los viñedos. Era guía turística en inglés y chofer.
Fui guía, pero en español, haciendo la misma tarea, también en portugués, hasta que llegó el Covid y estuvimos dos años encerrados.
En esos tiempos me pude dedicar a vender y hacer marketing de bicicletas eléctricas; hoy estoy en una agencia de viajes vendiendo paquetes para el sur de América en portugués y español y otros lugares del mundo.
Queestown; una ciudad donde pasan millones de turistas al año
“La ciudad donde vivimos es como una villa, residen muchos sudamericanos y de otros países europeos. Incluso hay un equipo de futbol llamado los charrúas, conformado por uruguayos, aunque también había argentinos.”

El turismo, la cultura y los servicios
“Para recorrer el país ellos (empresas de turismo) te ofrecen motor home´s a un bajo precio, después lo otro que nos llamó la atención es que por ejemplo hay una explotación del turismo al máximo; por ejemplo, en Nueva Zelanda se filmó la película de Harry Potter, hay visitantes de todo el mundo todo el tiempo. Invierten muchísimo dinero en promoción, pero también son buenos anfitriones.” Agrega Lucia
La salud su punto débil y una educación más práctica que teórica
“El sistema de salud no es muy bueno, hace falta médicos, hay una corriente migratoria muy grande hacia Australia donde pagan mejor.
La educación es más práctica que teórica; ves a los niños de 4 años esquiando o haciendo saltos en las montañas desde muy pequeños. Es decir, se crían más audaces y con menos miedos.
Los neo zelandeses tienen un cuidado muy especial por su país, tienen una cultura y un manejo de los servicios muy distinto. Para contratar un sistema de corriente eléctrica hay 18 empresas que pueden hacerlo. El agua es gratis y los alquileres se pagan por semana”.
