POR JUANJO ALBERTI
Los Cañones de Navarone
in dudas, «Los cañones de Navarone» -«The guns of Navarone»- es una película clásica, que dió la vuelta al mundo, basada en la novela homónima de Alistair MacLean, que acaba de cumplir sus sesenta años. Estrenada en 1961, está ambientada en el transcurso de la Segunda Guerra Mundial, 1943, donde la inteligencia aliada reúne una unidad de comando asignada para infiltrarse en un puesto de avanzada nazi en la isla Navarone en el mar Egeo que contiene dos supercañones -que son la amenaza de los barcos aliados- dirigidos por radar que retienen a 2.000 soldados británicos como rehenes. Fue nominada a seis premios Oscar de la Academia 1962 y ganadora de Mejores Efectos Especiales. Laurel de Oro 1962 a Mejor Película Dramática, y Globo de Oro 1963 a Mejor Película, y Mejor Música. Rodada en locaciones de Grecia, México, Senegal, y California, la cinta es dirigida por J. Lee Thompson, producida por Carl Foreman, teniendo como protagonistas a Gregory Peck, Anthony Quinn, y David Niven, junto a Stanley Baker, Anthony Quayle, Irene Papas, Gia Scala, James Darren, y Richard Harris.

«AMOR SIN BARRERAS» y «LOS CAÑONES DE NAVARONE»
Mientras el cine y la industria de Hollywood progresaba a pasos adelantados en el comienzo de la década del sesenta, en 1961 aparecieron varios largometrajes que conmovieron a la crítica y a los espectadores, con notable taquilla en salas por el mundo: «West Side Story» -«Amor sin barreras»- dirigida por Robert Wise y Jerome Robbins, con Natalie Wood, Richard Beymer, y Rita Moreno, considerado el segundo mejor musical del cine estadounidense por American Film Institute, y «The guns of Navarone» -«Los cañones de Navarone», del género bélico, como muchos lo llamaron «un melodrama típico en tiempos de guerra, lleno de acción y matices…» que logró impactar por su argumento, desarrollo, efectos especiales para la época, reparto, entre otras. El filme ocupó un lugar muy importante en un ciclo de películas -de gran presupuesto en esos tiempos- ambientadas en la Segunda Guerra Mundial, donde estaban incluídos: «El puente sobre el río Kwai», 1957, «El día más largo del siglo», 1962, y «El gran escape», 1963.

La novela de MacLean había sido un suceso de ventas y fue leída por Mike Frankovich, director de Columbia Pictures, quien se entusiasmó con sus posibilidades cinematográficas.
Se lo mostró a Carl Foreman, que había escrito «Bridge on the river Kwai» y tenía un contrato de producción con Columbia, que no estaba tan convencido al principio, en parte porque sabía lo difícil que sería hacer una versión cinematográfica. Foreman finalmente cambió de opinión y accedió a hacer realidad la cinta.
DIMITRI TIOMKIN
EN LA BANDA SONORA
La banda sonora de «Los cañones de Navarone» fue compuesta por Dimitri Tiomkin y contó con arreglos de varios temas tradicionales:»The guns of Navarone», «Karagouna», «Ena Karavi Apo Te Chio», «Yalo Yalo», «Treu Sein», «Das Sundenlied». El tema principal de Tiomkin aparece en el álbum de la banda sonora con letras que relatan la trama de la película. Su tema se convirtió en un instrumental popular con varias versiones, incluida una versión de 1965 de The Skatalites . Johnny Griffin , Al Caiola y Hollyridge Strings interpretaron otras versiones. El álbum de «Los cañones de Navarone» vendió miles y miles de discos en todo el mundo, acompañando el impacto de la película.

ESTRENO MUNDIAL
«Los cañones de Navarone» tuvo su estreno mundial en ayuda a Edwina Mountbatten Trust, en presencia de Su Majestad la Reina Isabel II y Su Alteza Real el Príncipe Felipe, Duque de Edimburgo, en el Odeon Leiscester Square en el West End de Londres. La producción logró recaudar casi 29 millones de dólares de taquilla, generando 13 millones en Estados Unidos y Canadá, y fue la segunda película más taquillera de 1961, generando en el mundo: más de 30 millones de dólares. El Capitán Keith Mallory interpretado por Gregory Peck fue el verdadero héroe de la produccción, donde se destacan grandes encarnaciones como por ejemplo la de David Niven o del propio Anthony Quinn. La película tuvo una secuela, Fuerza 10 de Navarone, 1978. Juanjo Alberti. Más allá de la nostalgia.
