Sucedió en la segunda rueda de la Serie “B” de la zona Litoral-Norte, cuando se enfrentaron Paysandú y Salto. Casi 1.800 aficionados en el Estadio Artigas de Paysandú, el que incluye una capacidad total para 25 mil aficionados. Teniendo en cuenta los antecedentes, esa suma de aficionados, más o menos contempló a la Liga de Fútbol que preside el Cr. Nelson Manzor. Pero un hecho en esa ocasión fue remarcado a cronistas de EL PUEBLO: por el pago de una entrada, ingresaban dos personas. Fue la fórmula que aplicaron los sanduceros, para incrementar el número de aficionados. La misma situación se planteó ante Rivera, en la fatídica noche en que la blanca cayó a manos de los celestes, mediante la ejecución de tiros desde el punto penal. Tanto Salto como Paysandú, quedaron por el camino en la misma etapa, con avances de Tacuarembó y Rivera. Lo real es que la dirigencia sanducera se atrevió en la fórmula descripta. A nivel de la Liga Salteña de Fútbol no se apuntó en esa misma dirección: ¿qué hubiese pasado?
