Nos contaba una lectora hace dos o tres días, que un familiar suyo había tenido una descompensación en un gimnasio y, más allá que el tema no pasó a mayores y fue solucionado rápidamente por una unidad médica que acudió, muy poco pudieron o supieron hacer quienes estaban al frente del gimnasio.
Creemos haber tocado ya este tema en otras ocasiones. Sabido es que el de los gimnasios es uno de los rubros que más ha crecido en nuestro medio. La pregunta es: ¿todos cumplen con lo necesario? Como nos decía la persona que nos llamó días pasados, no es la idea quitar trabajo a nadie, pero cuando se trata de la salud, no se puede permitir todo.
Hace un tiempo dijimos que en los ómnibus del transporte urbano hay muchas cortinas rotas, muy rotas. Con el sol fuerte, esto se transforma casi en un drama para los pasajeros. Ayer una señora nos decía que “es la gente la que rompe todo, tiran de un lado y de otro, vi cortinas nuevas hechas pedazos en pocos días”. Lamentable.
Hay nuevamente problemas con los semáforos en la ciudad. Viernes y sábados fueron días en que se sintió la falta de estos en varios cruces. Sarandí y Rivera, por mencionar uno donde no estaba funcionando.
Nos dicen que desde hace una semana más o menos, se está dando en Salto un número importante (fuera de lo común) de personas afectadas por vómitos y fiebre. Averiguaremos más.
