Amanecimos ayer con la tragedia de una persona fallecida en siniestro de tránsito en la avenida Ferreira Aldunate. Independientemente de ese hecho puntual, nos decían algunas personas que el tránsito a esa hora ya era más intenso que otros domingos en ese lugar. Claro, es justamente una zona de mucho movimiento no solo para quienes entran a la ciudad desde el sur, sino también para quienes hacen el recorrido hacia y desde las Termas del Daymán.
No muy lejos de allí, pero por la ruta, está el depósito de chatarra tan cuestionado por muchos salteños desde hace años. Una persona nos volvía a hablar ayer de ese tema. Nos decía que, por un lado, “da una mala imagen a quien entra a Salto”, y por otro, “¿no es peligroso por el Dengue?”.
A propósito, se lee y escucha mucho por estas horas a quienes exigen a la Intendencia más acciones para combatir el mosquito que causa la enfermedad; y también a quienes insisten con que lo fundamental es el cuidado de cada ciudadano. Seguramente como en tantas cosas, y lo decimos siempre, las dos partes importan.
Ahora bien…Hablando de peligros vinculados a la salud, ¿y con el enorme vertedero a cielo abierto que tiene Salto qué se piensa hacer? No se vislumbran proyectos ni siquiera en un año electoral como este, al menos por ahora. Esperemos que aparezca alguno, y no sea solo una promesa más.
