Jornada de mucha lluvia fue la de ayer martes. Si se piensa en la gente que está desplazada de sus hogares por la crecida del río, es un toque más de incertidumbre y de complicaciones. De hecho, el viento del domingo a la noche ya había complicado bastante las carpas. Vale recordar que además de las instalaciones preparadas por CECOED en el Parque Harriague, son muchas las personas que armaron sus propias carpas en diferentes puntos de la ciudad.
A propósito de la creciente, una lectora nos decía textualmente ayer: “se habla mucho de la mugre que arrastra el agua, pero si quieren comprobarlo directamente los invito a mirar desde el puente de La morcilla hacia el sur”. Y la verdad que pudimos observar el lugar: se ve flotando desde bolsas de basura hasta pedazos de muebles y electrodomésticos de todo tipo. Triste imagen.
“Se extraña el barrido de antes en las calles”, dice un profesional en un artículo sobre el problema de los cauces de agua en la ciudad. Sucede que, aunque la gente barra, a veces deja muchas hojas amontonadas, es decir se acumula mucha basura que complica todo el funcionamiento de los desagües y demás. No vendría mal un estudio sobre el tema, para poder luego actuar en consecuencia.

“Si usted se fija en el recibo de la Contribución, ahora dice solo Recolección, ya no Recolección y Barrido como decía antes”, nos hacía ver un lector hace pocos días.