Esta semana se ha intensificado considerablemente el movimiento en las calles de la ciudad, sobre todo en las horas pico de entrada y salida de escolares y liceales a sus centros de estudio. Esto ha traído un problema en el tránsito que no es nuevo: el de las aglomeraciones de vehículos frente a escuelas y liceos… y en días lluviosos más aún.
En algunos casos hay inspectores de tránsito, y entonces todo es más ordenado. No solamente porque los funcionarios controlan y ordenan la situación, sino también porque su sola presencia hace que muchos conductores se cuiden de no cometer ninguna infracción.
Hablando de movimiento, todo fue prácticamente normal el martes a pesar del paro de 24 horas. En la Educación, por ejemplo, el acatamiento de la medida por parte de los docentes fue muy escaso. En el movimiento que habitualmente generan los Bancos, tampoco se notó gran diferencia. A esto se le suma que el área de Transporte apoyó la medida pero “de palabra”, es decir, sin parar sus actividades, por lo que fue un día casi normal en ese sentido.
Vecinos de Saladero se han comunicado con nuestra Redacción para reclamar por “una pérdida muy grande de agua, que tenemos acá la vuelta de la escuela del barrio”, nos dicen. Efectivamente, el problema está en la calle Yaro a la altura del 1600.
