Lamentablemente la cantidad de casos de Covid positivo en el país, realidad de la que Salto no
escapa, hace que la espera del Año Nuevo, que podría ser una fiesta, se vea empañada.
Seguramente, uno de los deseos que más se han pedido en estas horas es que en 2022 se
termine de una vez por todas la pandemia.
Cómo serán los largos tres meses que aún restan del verano, es de las cosas que más se
pregunta y comenta la gente en las calles. Ya se ha dicho que serán de temperaturas muy altas
y pocas lluvias. Según comentan muchos, hemos empezado a transitar uno de los veranos más
calurosos de los últimos diez o quince años. Queda todavía mucho por soportar quienes
prefieren el frío y mucho por disfrutar quienes gustan del calor.
Los incendios en Salto no dan tregua a los Bomberos. Desde hace unos cuantos días se vienen
suscitando uno tras otro. Alguien nos recordaba que precisamente ayer, 1° de enero, se
cumplieron cuatro años del incendio en el Paseo de Compras, o Bagashopping, uno de los más
destructores de los últimos años.
Las costaneras han sido un año más el lugar predilecto por los salteños para descansar en los
feriados que marcan las fiestas tradicionales, tanto el 25 como ayer. Una de las cosas que
aflige es que sigue viéndose a muchísima gente ingresar al río en zonas no habilitadas para
baño. Pasan los años y esta parece una conducta de no corregirse nunca.
