Fin de año significa también en toda institución educativa, uno de los períodos de exámenes más importantes. Pero la pandemia que se vive ha complicado todo el año y este final no es la excepción. Exámenes que han debido cambiarse de presenciales a virtuales es un ejemplo. Pero lo que más afecta es la suspensión de algunos de ellos, como ha ocurrido a nivel universitario, según pudimos saber.
Los más afectados son aquellos estudiantes que ya venían estudiando y que para ello habían extendido un alquiler en Salto, o habían sacado una licencia, etc. Sin dudas que no viene siendo nada fácil organizar estas cuestiones al final de un año tan particular, y en general son los alumnos, como en estos casos, los más perjudicados.
Muy molesto se comunicó con nuestra Redacción en la jornada de ayer un vecino del barrio Almagro. “Tres cosas me tienen preocupado de mi barrio –dijo-: lo poco frecuente que es el servicio de barrido, la cantidad de motos que se estacionan arriba de las veredas y la velocidad con que andan las motos, y muchas sin luz, sobre todo alrededor de las diez de la noche”.
Más allá del reclamo concreto de esta persona, hay que decir que son quejas bastante comunes y no exclusivas de un barrio. A ellas se podría agregar los pozos en las calles, como los planteos más recurrentes que recibimos a diario.