POR: JUANJO ALBERTI
TONY BENNETT:
De gran y larga trayectoria, Tony Bennett, ha obtenido a través del tiempo 19 premios Grammy -incluído un Lifetime Achievement Award, 2001- y dos Primetime Emmy Awards, siendo nombrado NEA Jazz Master, y Kennedy Center Honores, vendiendo más de cincuenta millones de discos en todo el mundo. Su camino en la música se inicia en 1936 y hasta el presente con 94 años en su haber continúa en actividad. Siempre evocado por el público, de acuerdo a interpretaciones que supieron marcar su carrera a través del tiempo, al estilo «Blue velvet», y «I left my heart in San Francisco», base de su extenso repertorio de baladas clásicas que lo han identificado, recorriendo un camino sin tiempo, ni edad. Debutó en la poderosa Columbia firmando su primer disco número uno «A causa de ti», en 1951. Seguiría con «Rags to riches», luego abarcando otro estilo comenzó a cantar jazz, logrando un alto pico artístico a fines de los años cincuenta con diferentes álbumes: «The beat of my heart» y «Basie swings, Bennett sings». Todo un referente, Anthony Dominick Benedetto, tal su verdadero nombre, hizo un extenso impasse debido al fenómeno del rock, y varios inconvenientes personales en las décadas del setenta y ochenta, regresando posteriormente conquistando con sus canciones nuevas generaciones.

POR EL ARTE y LA LITERATURA
Tony Bennet nació el 3 de agosto de 1926 -va rumbo a los 95 años- en el Hospital Episcopal Sr. John, en Long Island City, Queens. Hijo de la costurera Anna Suraci, y del propietario de una tienda, John Benedetto. Fue el primer miembro de la familia en nacer en un nosocomio. Tony creció junto a una hermana y hermano mayores, Mary, y John Jr. El padre viendo las condiciones artísticas que poseía su hijo menor, le inculcó el amor por el arte y la literatura, pero lamentablemente falleció cuando Tony tenía tan sólo diez años. Bennet se fue desarrollando sintonizando las radios junto a su familia y amigos, escuchando a Eddie Cantor, Judy Garland, Bing Crosby y Al Jolson, así como a las notables figuras del jazz de ese momento: Jack Teagarden, Joe Venuti, y Louis Armstrong. Su tío Dick era un bailarín de vodevil, lo que le otorgó una temprana introducción al mundo del espectáculo, y su tío Frank era el encargado de la biblioteca del condado de Queens. Así, se fue criando al lado de su familia.

ENTRE EL DIBUJO, EL CANTO, y EL PINCEL
A los diez años Tony ya estaba cantando, y lo llamaron para la inauguración del Puente Triborough, donde entonó varias canciones en presencia del alcalde Fiorello La Guardia, que se sintió atraído por la voz del pequeño gran cantante. El dibujo y pintar fueron sus primeras pasiones, ya haciéndose conocido en la escuela como caricaturista, anticipando su otra carrera de arte comercial. A los 13 años ya entonaba temas por dinero, ofreciendo un show como cantante camarero en varios restaurantes italianos que estaban alrededor de su ciudad. También le dió el tiempo y el espacio para estudiar pintura y música, es por eso que más adelante se apreciaría su avance en las distintas artes aludidas. Lamentablemente abandonó los estudios a los 16, para ayudar a mantener su familia, trabajando como corredor para la agencia de noticias Associated Press, en Manhattan, sin embargo, lo pensó bien y prefirió ubicarse como cantante profesional, actuando durante una temporada en un conocido night club de Paramus, Nueva Jersey. Este sería el verdadero despegue para Tony Bennett.

BOB HOPE LE CAMBIA EL NOMBRE
Ya en 1949, al irse Bob Hope de gira por distintos estados norteamericanos, le pidió a Tony que lo acompañara en la tourné, Tony aceptó y Hope le puso su nombre artístico, el que tiene hasta éstos días. Las presencias de Bennett por los distintos escenarios acrecentó el interés de Columbia en tenerlo en sus filas, y le firma un contrato para grabarle sus melodiosos temas. En la década de los cincuenta, va de éxito en éxito, y su inmensa popularidad llega a la pantalla chica con un programa semanal de variedades en NBC, llamado «The Tony Bennett Show», sustituyendo a Perry Como. En 1952 se casó con una fans, Patricia Beech, con quien tuvo dos hijos: Danny y Dae, los cuales son colaboradores suyos desde los años ochenta. La pareja se divorció en 1971. En 1957 edita el citado álbum «The beat of my heart», clara aproximación al jazz que tuvo buena acogida en todos los aspectos. Anticipándose a Frank Sinatra, fue el primer cantante de música popular que colaboró con Count Basie y su orquesta; publicando juntos dos discos, siendo su tema más recordado, el clásico «Chicago», que también grabaría Sinatra.

CONFORMABA LA ELITE DE SINATRA
Con un fuerte relacionamiento con Frank Sinatra, en el orden de trabajo y de amistad, se le veía de forma periódica junto a «la voz», Sammy Davis Jr., y Dean Martin, entre otros. También se desarrolló como pintor, habiendo creado obras bajo su nombre real, las cuales se encuentran en exhibición pública permanente en varios museos e instituciones. Por otra parte es el fundador de la Escuela de Artes Frank Sinatra, en Astoria, Queens, Nueva York. Bennet reapareció a fines de los ochenta y noventa, obteniendo discos de oro nuevamente por super ventas, logrando penetrar con fuerza en las nuevas generaciones de MTV, manteniendo intacto su estilo. Entre tanto, tiene una colaboración con Lady Gaga, luego de haber efectuado una gira y lanzado juntos el álbum «Cheek to cheek», 2014, por el que ganaron la distinción Grammy al «Mejor álbum vocal pop tradicional». En 2018, lanza con Diana Krall, «Love is here to stay». Este año se revela que Tony Bennett padece Alzhéimer desde hace cinco años, pero sigue activo con sus shows. Su guía es su actual mujer, Susan Crow, quien ha manifestado que es precisamente la música su mayor aliada para batallar en contra de ésta enfermedad degenerativa. Juanjo Alberti. Más allá de la nostalgia.