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n tremendo caso que involucra a un niño de 6 años de edad, alertó a las autoridades policiales y conmocionó a los médicos del Hospital local, luego que fuera descubierto el hecho.
El pequeño tenía atado su pene y sus testículos fuertemente apretados con un hilo, lo que le impedía orinar, generándole acumulación de orín en su vejiga y un tremendo dolor abdominal que fue el motivo por el cual lo trasladaron al nosocomio, donde descubrieron esta lamentable situación.
El hecho, dio lugar de inmediato a la intervención policial, que detuvo en primera instancia a la madre del pequeño, que lo había acompañado al Hospital, aunque ésta declaró que desconocía la situación.
Al tiempo que ahora la Policía sigue investigando el hecho para tratar de aclarar las condiciones que rodean este caso, mientras tanto el niño permanece internado en el Hospital, recuperándose favorablemente.
TREMENDO
“Se trata de una familia con escasos recursos económicos y muy poca instrucción”, señalaron a este diario fuentes consultadas sobre este asunto.
Resulta que el pequeño de 6 años de edad, concurre a la escuela cercana al barrio donde vive, el Andresito 2, pero hacía algunos días que estaba faltando porque “le dolía mucho la panza”, dijo su madre a los médicos tratantes y a la policía que vino después.
Hasta que llegó un momento en el que decidieron embarcarse al Hospital porque encima, habría sido quemado con agua caliente. Por lo cual la propia familia acudió a la Policía y solicitó que fueran trasladados hasta el nosocomio.
Pero ante la atención del médico vino la sorpresa y el alma se le cayó a los pies. Según el relato informado por la Seccional Cuarta de Policía, el día 13 de setiembre a las seis de la tarde, fue atendido en el Hospital local un niño de 6 años de edad, domiciliado en el barrio Andresito 2 (una extensión del Andresito pero más precario aún).
ENCIMA QUEMADO
La información oficial establece que según adujo la madre del menor, el mismo había sido quemado en los genitales con agua caliente.
Pero en el examen médico se descubrió algo más terrible que esto. La médico actuante, observó un piolín azul que estaba atado firmemente a la raíz del pene del pequeño, y diagnosticó que esta situación le provocó “parafimosis por comprensión extrema, se sugiere intervención policial porque pudo ser causado por otra persona”.
La médico actuante denunció que el niño padece de “edema de pene con corrimiento de prepucio hacia atrás, glande expuesto igual a parafimosis, piolín atado firmemente a la raíz del pene, tiene además inflamación de testículos y de abdomen por tener testículos atados, debiendo ser colocado un aparato para sacar orina acumulada”.
El menor fue internado en el Hospital, mientras que la madre del pequeño que fue interrogada de inmediato por la policía, dijo que no sabía nada al respecto.
Asimismo, la jueza penal de turno, ordenó que la misma fuera trasladada a la sede judicial donde fue interrogada al respecto y se abrió una investigación judicial para determinar causas del episodio e individualizar a los responsables.
El niño sigue internado en el Hospital donde se lo está tratando para que supere el problema padecido sin mayores problemas, aunque la Justicia plantea una vigilancia y seguimiento a la familia para esclarecer aspectos vinculados con la forma de vida del grupo familiar. El caso fue lamentable.
Un tremendo caso que involucra a un niño de 6 años de edad, alertó a las autoridades policiales y conmocionó a los médicos del Hospital local, luego que fuera descubierto el hecho.
El pequeño tenía atado su pene y sus testículos fuertemente apretados con un hilo, lo que le impedía orinar, generándole acumulación de orín en su vejiga y un tremendo dolor abdominal que fue el motivo por el cual lo trasladaron al nosocomio, donde descubrieron esta lamentable situación.
El hecho, dio lugar de inmediato a la intervención policial, que detuvo en primera instancia a la madre del pequeño, que lo había acompañado al Hospital, aunque ésta declaró que desconocía la situación.
Al tiempo que ahora la Policía sigue investigando el hecho para tratar de aclarar las condiciones que rodean este caso, mientras tanto el niño permanece internado en el Hospital, recuperándose favorablemente.
TREMENDO
“Se trata de una familia con escasos recursos económicos y muy poca instrucción”, señalaron a este diario fuentes consultadas sobre este asunto.
Resulta que el pequeño de 6 años de edad, concurre a la escuela cercana al barrio donde vive, el Andresito 2, pero hacía algunos días que estaba faltando porque “le dolía mucho la panza”, dijo su madre a los médicos tratantes y a la policía que vino después.
Hasta que llegó un momento en el que decidieron embarcarse al Hospital porque encima, habría sido quemado con agua caliente. Por lo cual la propia familia acudió a la Policía y solicitó que fueran trasladados hasta el nosocomio.
Pero ante la atención del médico vino la sorpresa y el alma se le cayó a los pies. Según el relato informado por la Seccional Cuarta de Policía, el día 13 de setiembre a las seis de la tarde, fue atendido en el Hospital local un niño de 6 años de edad, domiciliado en el barrio Andresito 2 (una extensión del Andresito pero más precario aún).
ENCIMA QUEMADO
La información oficial establece que según adujo la madre del menor, el mismo había sido quemado en los genitales con agua caliente.
Pero en el examen médico se descubrió algo más terrible que esto. La médico actuante, observó un piolín azul que estaba atado firmemente a la raíz del pene del pequeño, y diagnosticó que esta situación le provocó “parafimosis por comprensión extrema, se sugiere intervención policial porque pudo ser causado por otra persona”.
La médico actuante denunció que el niño padece de “edema de pene con corrimiento de prepucio hacia atrás, glande expuesto igual a parafimosis, piolín atado firmemente a la raíz del pene, tiene además inflamación de testículos y de abdomen por tener testículos atados, debiendo ser colocado un aparato para sacar orina acumulada”.
El menor fue internado en el Hospital, mientras que la madre del pequeño que fue interrogada de inmediato por la policía, dijo que no sabía nada al respecto.
Asimismo, la jueza penal de turno, ordenó que la misma fuera trasladada a la sede judicial donde fue interrogada al respecto y se abrió una investigación judicial para determinar causas del episodio e individualizar a los responsables.
El niño sigue internado en el Hospital donde se lo está tratando para que supere el problema padecido sin mayores problemas, aunque la Justicia plantea una vigilancia y seguimiento a la familia para esclarecer aspectos vinculados con la forma de vida del grupo familiar. El caso fue lamentable.
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