Días pasados se recordó en el país el Día (de lucha) contra la Fibromialgia, iniciativa que nos parece loable, pero insuficiente. Se trata de una enfermedad “rara” que hasta el momento no se sabe que la ocasiona, debido a que puede tener múltiples causas y consecuencias.
Pero tenemos que decir al respecto que entendemos que hasta el momento no se ha hecho, ni se hace lo suficiente para encasillerarla y combatirla. La Fibromialgia, según el diccionario puede ser la percepción más aguda de un dolor, pero la cuestión es que se trata de una enfermedad endémica, difícil de diagnosticar que causa dolor agudo y permanente en todo el cuerpo y que no ha sido encarada como corresponde por parte de la ciencia para disminuir sus efectos.
No se trata de una enfermedad mortal, pero si de una enfermedad capaz de perturbarnos a punto tal que no seremos capaces de concentrarnos en una tarea, debido al dolor y malestar causado por esta enfermedad.
Desde luego que entendemos las dificultades que presenta, pero mal que nos pese, entendemos también que está inmersa en el tema de la salud y mientras ésta sea mirada y considerada como una mercancía más, es poco lo que podemos esperar de ella.
Nos explicamos y para ello relatamos lo que sucede con los afectados por otra particularidad, los celíacos. Como es sabido, este tipo de pacientes no puede ingerir pizca alguna de gluten, debido a los trastornos que les provoca. El tema está que los alimentos que no contienen gluten son pocos y caros. El Estado lo sabe, las autoridades de la salud lo saben, pero que sepamos nadie ha hecho nada para hacerlos más accesibles de quien o quienes lo necesitan.
La salud en nuestros días debería de ser prioridad para todo ser humano. Lamentablemente no es así y no busquemos culpables de esta situación, porque la decepción será grande.
La salud humana está considerada como una mercancía más. Lamentablemente nadie escapa a esta necesidad y de acuerdo a las posibilidades actuales, solo pueden acceder a ella quienes tienen los medios imprescindibles para ello.
La fibromialgia no escapa a esta realidad y como parte de los enfermedades “raras” y no tanto tiene pocas posibilidades de ser dominada y mucho menos erradicada.
Llegará el momento en que tendremos que asumirlo. Ojalá sea antes que el ser humano esté tan vulnerable por sus propios errores que ya se considere irrecuperable.
A.R.D.