El 7 de noviembre cuando Saladero y El Tanque jugaron por última vez.
Saladero finalizó en la segunda posición del Campeonato Apertura ganado por Ferro Carril, mientras El Tanque en la octava posición, pero lanzado de cuerpo y alma a una ilusión: que el Tribunal de Apelaciones de la Organización del Fútbol del Interior le concediera la razón en su reclamo después de la pérdida de puntos cuando a nivel de la Liga Salteña, el aval fue para Saladero.
El lunes fue un día de gloria para El Tanque.
Gritó a los cuatro vientos cuando el fallo desde Montevideo lo reavivó quedándo con la séptima plaza, postergando a Salto Uruguay.
Por lo tanto el turno pendiente de play off, resolvía la situación. Uno de los dos: o Saladero o El Tanque. El primer partido será esta noche desde las 20.30′ en el Parque Ernesto Dickinson.
Si gana Saladero, avanza a la liguilla. En caso de empate, un segundo partido. O más claramente: El Tanque está obligado a ganar 4 de los 6 puntos. Por lo menos.
Caso contrario, se queda afuera del concierto de final de año. Balconeará la liguilla. Pero no la jugará.
LA ILUSIÓN RESISTIENDO
Después de todo, un mes inactivos. Tanto Saladero como El Tanque, tendrán que resistir al perjuicio que puede suponer cuatro semanas sin acción directa y menos exigencia.
Tendrán que resistir ante la duda abierta: ¿qué nivel de exposición ahora, después de 30 días «parados» y a la espera?
En qué medida resistirán, para que hoy a la noche, la convicción es la que trascienda y gane espacios. Es el paso previo a la liguilla. Saladero se mandó un campañón y fue segundo detrás de Ferro Carril. Diez equipos por debajo del Saladero de Alejandro Irigoyen.
El Tanque siempre fue digno queriendo y con Roger Galeano jugando, la cuota de arte y gol capaz de no faltar. No es fácil establecer un favoritismo tajante, pero está claro que la historia en el Apertura, le amplía un mejor porcentaje para Saladero. Pero son partidos especiales.
Desde lo táctico a lo emocional. Los dos lo saben. No podrán caer en lagunas excesivas. Tendrán que resistir a los suspensos. Cuanto mayor garantía mejor. Seguro que también lo saben.
