El caudal del río Uruguay continúa creciendo debido a las lluvias torrenciales causadas por un ciclón registrado en el estado brasileño Río Grande do Sul, afectando el normal funcionamiento de varios puertos y servicios administrados por la Dirección Nacional de Hidrografía. El Director Nacional, Marcos Paolini, estudia la situación de las instalaciones de los puertos buscando soluciones a estas problemáticas.
En el Puerto de Bella Unión, el agua alcanzó una altura de 8 metros, dejando las instalaciones completamente inoperativas. Ante esta situación se solicitó a UTE el corte de energía eléctrica como medida preventiva, mientras se sigue monitoreando la situación. En tanto, la oficina de Hidrografía del Puerto General Enrique Martínez (La Charqueada), se encuentra aislada debido al corte de rutas de acceso desde Rocha y desde Treinta y tres, lo que ha dificultado la conectividad y la comunicación.
Además, el Puerto de Mercedes se ha visto obligado a cerrar sus puertas debido al desborde del agua sobre la rambla, alcanzando los 6.50 metros de altura. Para garantizar la continuidad de las operaciones, la oficina portuaria ha sido trasladada a las instalaciones de Hidrografía en el centro de la ciudad, los depósitos de Vías Navegables a la oficina central y algunos elementos al corralón municipal, como en ocasiones anteriores.
Por otra parte, la Embarcación Quinteros ha sido trasladada a un amarre alternativo desde el Puerto, mientras que los pasajes de Balsa de San Gregorio y Picada de Ramírez han suspendido sus servicios, debido a las condiciones hidro-meteorológicas adversas, garantizando la seguridad de los usuarios y funcionarios.
Asimismo, se han emitido directivas al Área de Vías Navegables para que el Varadero de Carmelo comunique y alerte a los propietarios de buques del álveo del Arroyo de las Vacas y verifique los amarres correspondientes, asegurando la integridad de las embarcaciones.
Como resultado de las condiciones climáticas actuales, las actividades de inspección de extracción de materiales han sido suspendidas temporalmente, y las obras en los Bañados de Rocha y Punta Carretas se encuentran detenidas hasta nuevo aviso. Se espera que estas medidas temporales ayuden a mitigar los efectos de las condiciones climáticas extremas en las operaciones portuarias.
