Pequeños productores del Norte enfrentan una ola de frío que recuerda las devastadoras heladas de 2024; temen una nueva emergencia agropecuaria sin asistencia asegurada.
EL FRÍO VUELVE A AZOTAR Y EL SECTOR HORTÍCOLA TEME LO PEOR

La llegada anticipada del frío profundo vuelve a encender las alarmas entre los productores hortifrutícolas del Norte del país. En especial en Salto, donde la memoria de lo ocurrido en julio de 2024 —cuando heladas extremas diezmaron los montes cítricos— aún pesa con fuerza.
Aquel episodio, con temperaturas que no se registraban desde 2012, afectó sobre todo a pequeños productores, quienes sufrieron pérdidas devastadoras por una contingencia no asegurable. A diferencia de lo sucedido recientemente en el Sur, donde el granizo sí estaba contemplado por seguros, y cuyas autoridades están a punto de declarar la emergencia agropecuaria retroactiva, en el Norte más de setenta solicitudes de asistencia quedaron sin respuesta. “Duermen el sueño de los justos en los anaqueles del Ministerio”, dicen los afectados.
Así lo advertía en el programa Informe Granjero de CX 30 el Director Técnico de DIGEGRA, ingeniero Ramiro Vacca, quien recordó que el plazo para presentar solicitudes de ayuda vence este domingo 30 de junio. También aseguró que las autoridades vigilarán que los fondos otorgados sean usados “genuinamente” para su fin.
HELADAS EN SALTO: IMPACTO Y PREOCUPACIÓN
En la última semana, las heladas se intensificaron en el departamento de Salto. Si bien las temperaturas, en torno a -1,5 °C a -3 °C, aún no afectan gravemente a los cítricos, sí comienzan a impactar en los cultivos hortícolas más sensibles.
Productores de Barrio Albisu indicaron que, gracias a medidas preventivas como doble nylon en invernáculos y cielorrasos, lograron minimizar daños. “Tuvimos algo de afectación en las plantas más altas, pero por ahora es tolerable, una escaramuza invernal”, señalaron.
No obstante, el pronóstico para la próxima semana —especialmente martes y miércoles— preocupa seriamente: se esperan heladas más agresivas y prolongadas en el suelo, consideradas las más destructivas para los cultivos.
En zonas como Parada Herrería y Parada Viña, el panorama es desigual. Algunos invernáculos con aspersores resistieron bien, pero en otros, como en Constitución, el descuido costó caro: “Un productor no prendió los aspersores y perdió medio metro de plantas de tomate”, relataron.
MERCADO: LOS PRECIOS REFLEJAN LA TENSIÓN
Las condiciones climáticas ya se hacen sentir en los precios. En el mercado, la frutilla subió a entre $1.800 y $2.200 por plancha (8-9 kg). El zapallito también cotiza alto, hasta $2.200, mientras que el zuccini se ofrece a $900 por 10 kg.
Sin embargo, algunos productos no encuentran salida: “Tengo 60 bolsas de zapallo Koreano a $300 y no los vendo”, dijo un productor. Aún peor es el caso del calabacín mediano: “Lo pongo a $240 y tampoco se mueve”.
El informe semanal de precios de la Unidad Agroalimentaria Metropolitana (UAM) confirmó incrementos en frutilla, zapallito, pepino, tomate y morrones, aunque también se registraron bajas en papa, zanahoria, zapallo kabutia, limón y caqui.
Además, se destaca una abundancia en brócoli, coliflor y otras brasicáceas, lo cual podría presionar aún más a la baja los precios de esas hortalizas en el corto plazo.