Después de reyes cabe la reflexión que desvive a los padres y demás familiares ´´reyes” en estas fechas. ¿qué regalar? Lo primero a tener en cuenta que ya no son los mismos tiempos en que acostumbrábamos a vivir “la mágica ilusión de los niños” con los regalos de reyes.
Es que no sólo han cambiado los juegos, algunos ya han caducado, salvo para los primeros años, porque desde muy temprano en la vida la electrónica domina también este mundo y hoy los robots articulados, los autitos a control remoto ya sólo concentran la atención de los niños a temprana edad.
Después en delante será la electrónica, los juegos de la “play”, la computadora y en especial los celulares los que dominarán la predilección de los niños.
Este es el primer punto. ¿en que medida debo llevarme por lo que más les gusta a ellos?
Es el segundo desafío.
Para ello debemos tener en cuenta las consecuencias de los juegos infantiles.
El juego es un derecho de los niños, que necesariamente deben jugar, para distraerse, para socializarse y para educarse.
Entonces en ¿Qué medida debe incidir el niño?
Diríamos en la medida en que pudiéramos hacer coincidir las dos cosas. Algo de lo que más le divierte al niño y lo que sabemos que será de mayor y mejor provecho en el futuro para ellos.
Vale decir que pretender que juegue de la forma y con los juegos que jugábamos nosotros sus mayores, sería desubicarlo por completo de su época, hacerlo un “bicho raro”, a la hora de compartir con sus compañeros de clase o sus amigos.
Tanto como concederle la “play station”, la computadora o el celular sin límite alguno, es probable que fuera tan nocivo para su futuro como lo otro. Entonces ¿Cuál sería a nuestro juicio el mejor regalo? Pues nada difícil. Algo que el niño disfrute que pueda compartir con otros niños o mayores.
Si se trata de juegos electrónicos es importante saber elegírselos y disfrutarlos con ellos. No se debería abandonar el niño frente a los aparatos electrónicos, porque éstos tienen también acceso a otros elementos y no todos son beneficiosos.
En definitiva, los “reyes” también debemos formarnos, informarnos y prepararnos en los tiempos que corren, porque en caso contrario podemos hacer más daño que beneficios a quienes nos sucederán.
A.R.D.
