Artículo VIII- Diario “El pueblo”

Lic. en Psicología Cristina Beltramelli.-
Cuando estamos sufriendo emocionalmente o físicamente se tiende a activar el sistema de amenaza, o sea el sistema H-L-C (huida, lucha, congelamiento). La huida permite que el organismo se aleje del estímulo estresante, prepara al cuerpo para escapar de la amenaza. La lucha permite que el organismo responda a la amenaza con agresividad para protegerse y cuando se activa el congelamiento permite que el organismo se quede inmóvil como si estuviera paralizado ante una situación de estrés extremo, en la que huir o luchar no son opciones factibles.
Algo que debemos entender es que lo que nuestro cuerpo percibe como amenaza no siempre proviene del medio exterior, muchas veces lo que percibe como amenaza puede ser nuestra tristeza, nuestra rabia, nuestro dolor crónico y esto hace que experimentemos mucho estrés.
La huida se experimenta aquí como aislamiento, lo vivimos como la experiencia de que nadie nos entiende, como experiencia de que estamos solos. La lucha se experimenta como autojuicio: “por qué me enfermé”, “por qué me duele tanto esta separación”, “por qué no soy valiente para hacer ciertas cosas”. El congelamiento, por su parte, se experimenta como sobreidentificación con el malestar (como fusión). De esta manera cuando tenemos un dolor físico, mental o emocional el congelamiento se expresa como que nuestra atención está completamente “secuestrada” por la experiencia del dolor, estamos fusionados con el malestar como si el malestar es todo lo que hay.
En estos casos de sufrimiento nos viene bien la PRÁCTICA DE LA AUTOCOMPASIÓN para acompañar el dolor de manera más amorosa y saludable.
En primer lugar, atendemos el malestar con atención plena, no huimos de él, nombramos incluso que hay malestar y reconocemos que es una parte de la experiencia, no es la totalidad y además que no va a durar para siempre. Esto nos ayuda a ir defusionándonos y percibiendo la experiencia de malestar como algo transitorio.
Mindfulness o atención plena nos permite NOTAR lo que está ocurriendo, permite cultivar lo que se denomina “conciencia plena no- reactiva” ya que es opuesta a querer cambiar lo que está presente. Es tener conciencia de lo que está doliendo pero sin querer
cambiar el dolor, más bien se lo atiende con una actitud de apertura, curiosidad y aceptación.
No quisiera que se malinterprete, lo anteriormente afirmado no quiere decir que si tenemos dolor no vamos a consultar al médico o al psicólogo, quiere decir que cuando esté presente una manera saludable de acompañarlo es con atención plena y amabilidad, es ofrecernos amor y acompañarnos compasivamente.
De esta manera regula la experiencia de lucha al cambiar el juicio, la autoexigencia, la impotencia, por amor incondicional a uno mismo. En lugar de estar exigiéndome “debo poder” “tengo que salir de ésta”, lo que hacemos es darnos amor que nos permite recuperarnos cuando lo necesitamos, nos permite recuperar fortaleza, conectar con la resiliencia, a aprender del dolor que se siente. Esta actitud promueve la producción de oxitocina que ayuda a activar el sistema de calma.
Se dice que la AUTOCOMPASIÓN nos acompaña cuando la AUTOESTIMA nos abandona. Se afirma esto porque muchas veces cuando algo nos duele o algo nos sale mal, tenemos la sensación de que no dimos lo suficiente o no somos lo suficiente y es en ese momento donde la autocompasión “viene a abrazarnos con ternura”.
Les dejo, a continuación, una PRÁCTICA que los puede ayudar cuando estén sintiendo dolor o malestar:
1) Elige un lugar tranquilo para ti y adopta una postura cómoda, si no te produce ansiedad cierra los ojos…
2) Haz 3 respiraciones lentas y profundas inhalando por la nariz y exhalando por la boca…
3) Comienza, ahora, explorando el malestar que sientes mediante atención plena, puede ser de utilidad que nombres la incomodidad con voz paciente y amorosa “esto que siento es miedo”, “esto es rabia”, “esto es cansancio” etc.
4) Adopta una actitud amable y bondadosa mediante gestos (toques de autocontención) y frases, éstas no son frases de logro como “tú puedes, lo vas a lograr” sino de cobijo como “estoy aquí contigo” “te voy a cuidar”. De esa manera se ayuda a activar el sistema de calma y afiliación que es lo que se busca para recuperarnos de la presencia del malestar.
Este sábado 23/9/23 estaré dando el Taller “Afrontando tu ansiedad de manera segura”, el cual será abordado desde el enfoque de Mindfulness y Compasión. Si crees que este taller es para vos, comunícate a mi mail “[email protected]” o mi instagram “beltramellicristina”, que te estaré informando al respecto. ¡Te espero!







