1910 Fruitgum Co.: La máquina del chicle
Bubblegum Pop, lo llamaban
Muchos lo llamaron el bubblegum pop, o bubblegum music, y fue un estilo musical pop de estilo suave, a veces movido, grabado para atraer gente nueva a la música, más que nada jóvenes. El momento clásico del bubblegum hizo furor entre los años 1967 a 1972, sonando con fuerza en 1969-1970, luego se fue apagando de a poco ante la llegada de otras corrientes y modas bailables. Así, como para probar que pasaba, si realmente tenía éxito o no lo que presentaban, se lanzaron una cantidad de discos simples que eran prácticos para promover por las estaciones radiales, y también más accesible su precio para el público que estaba destinado. Además, no había tanto material como para editar en álbumes ya que la mayoría de las orquestas se formaban con músicos de sesión, que se juntaban en el estudio, para uno o dos temas a lo sumo. De todas formas, se lograron grandes hits, apareciendo bandas que marcaron una época de oro, tales como The Archies, The Ohio Express, y la más fuerte de todas, 1910 Fruitgum Company, la que desarrolló un período muy importante de sucesos, grabando sencillos y álbumes, realizando giras por todo Estados Unidos y alrededores.

«SIMON SAYS» y «YUMMY, YUMMY, YUMMY»
En 1968, el movimiento «chicle» se sacude ante la aparición de 1910 Fruitgum Co. con «Simon Says», y de Ohio Express haciendo «Yummy, Yummy, Yummy», bajo la producción de Jerry Kasenetz y Jeffy Katz, quienes -además- observando un envoltorio de goma de mascar, les llamo la atención un dibujo y lo que decía, «Esto es música de chicle». Eso, fue aprovechado por el ejecutivo Neil Bogart, del sello Buddah Records, que más tarde se aburriría de vender discos y discos de la onda bubblegum. El despegue de la 1910 Fruitgum fue excelente con «Simon Says», canción escrita por Elliot Chiprut y grabada originalmente en 1967, convirtiéndose en su «caballito de batalla», penetrando en el Billboard Hot 100 US, llegando al número cuatro, en el Reino Unido, subieron al número dos en la lista de sencillos, y se escuchó en el documental de 1968 de Frederick Wiseman «High School». El tema en cuestión fue la pieza principal del primer álbum de la banda. Luego, llegarían más hits: «May I take a giant step», «1, 2, 3, red light», «Goody goody gumdrops», «Indian giver», «Special delivery» y «The train».

JECKELL AND THE HIDES
1910 Fruitgum Co., se inició con el nombre de Jeckell and The Hides en Nueva Jersey en 1965. Sus componentes originales fueron Frank Jeckell, Floyd Marcus, Pat Karwan, Steve Mortkowitz y Mark Gutkowski, todos originarios de la ciudad de Linden, en Nueva Jersey. En el año 1967 firmaron con la editora Buddah Records, donde lanzaron cinco álbumes bajo su propio nombre y una variedad de simples, además de aparecer en el LP The Kasenetz-Katz Singing Orchestral Circus, que sonaba como grupo del estudio de grabación Buddah. La agrupación comenzó a realizar infinidad de giras, siendo teloneros de bandas como The Beach Boys, The Vogues, The Buckinghams, Mark Lindsay de Paul Revere and the Raiders, Sly and the Family Stone, y muchos más. En 1970 Fruitgum Co. se disolvió. Nueve años más tarde, la orquesta resucitó brevemente a través de la Agencia Jolly Joyce de Filadelfia, con los miembros Chuck Allen, Fred Eyer, Tony DiNiso, Cindy Tritz, y Mike Schneider. El 17 de noviembre de 2007 tocaron en directo en el recital «Caravan of Stars XIV», en Henderson, Tennessee, ante un lleno total de público.

SU ÚLTIMO CONCIERTO
Bajo la promoción de la banda de chicle de todos los tiempos, 1910 Fruitgum Company, realizó su último gran concierto hasta ahora en Nueva Jersey, el sábado 4 de junio de 2016, en el Grunin Center for the Arts, ubicado en el campus de Colegio del condado de Ocean, en Toms River. Subidos en el escenario abrieron la velada con «Yummy, Yummy, Yummy», de sus compañeros Ohio Express, luego realizaron «Midnight confessions» de The Grass Roots, «Daydream believer de The Monkees, «Happy together» de The Turtles, hasta llegar a sus clásicos «Indian giver», y «Simon Says». Estaban allí su cantante principal Mick Mansueto, el bajista Glenn Lewis, el guitarrista Frank Jeckell, miembro fundador de la agrupación, Bob Brescia, en los teclados, y Keith Crane, en batería. El punto alto de la noche fue cuando los espectadores solicitaron el bis de «Simon Says», el tema que explotara en las listas en su época, vendiendo tres millones y medio de ejemplares, recibiendo al respecto sendos discos de oro y platino. La multitudinaria audiencia levantó las manos, se puso a bailar, aplaudió y ovacionó. La experiencia para la 1910 Fruitgum Co. fue realmente conmovedora. Juanjo Alberti. Más allá de la nostalgia.