De autoría de la maestra Susana Vaz Tourem Torres son los textos que hoy ocupan esta página que EL PUEBLO dedica los lunes a la creación literaria de autores salteños contemporáneos. Susana ha editado varios libros, entre ellos, «Clarita y Julián», «La aventura de Andrés» y «Oculto amor y otros cuentos». Entre sus méritos dentro del campo de la producción literaria y la docencia, puede mencionarse, a modo de ejemplo, que desde hace unos quince años el libro «Clarita y Julián» fue autorizado por el Consejo de Educación Inicial y Primaria para ser incorporado como libro de apoyo docente y de uso en las aulas para actividades establecidas en los programas escolares. Los textos seleccionados para esta página, un relato y tres poemas, pertenecen al libro «Oculto amor y otros cuentos».
El infortunado picaflor
Cierta tarde, a la hora de la siesta, cuando todo era silencio, vimos llegar al jardín un bello picaflor que revoloteaba sin cesar.
Muy feliz se alimentaba con néctar de una planta: el plumerillo, arbusto de la familia de las acacias, de gran dimensión.
Con asombro comprobamos que allí también se encontraba el gato del vecino agazapado, esperando para atacar.
De pronto salta, lo atrapa y se aleja triunfante por el sendero.
Los presentes nos mirábamos sin decir palabra.
Lamentamos luego no haber podido salvar al pequeño pájaro.
-Hoy gozamos de la vida, mañana quizá no, comentó uno de los familiares sacudiendo la cabeza de un lado a otro.
Comprendimos en aquel momento la importancia de la existencia, de nuestro presente y el de plantas y animales.
Lo trágico, lo inesperado, de pronto sucede y nos golpea súbitamente con mucha fuerza.
Debemos por lo tanto, poseer un corazón fortalecido, como árbol de grandes raíces y ancha copa, para hacer frente a toda perturbación, angustia y desconsuelo.
Tratemos pues de vivir plenamente cada momento de nuestra efímera existencia.
Ha pasado una hora.
Mucha tranquilidad se percibe todavía, en el jardín, muchos pájaros vuelan, como si nada hubiera ocurrido.
Aquella estrella lejana
Sales a caminar
por aquel sendero
que te lleva
cerca del mar.
En la noche estrellada,
te sorprendes, ves
caer una estrella,
allá, a lo lejos.
El encanto de este cielo
te recuerda al familiar
querido, aquel que,
en noches como esta
engalanaba las reuniones
familiares con prudencia
y sabiduría.
la luna, como entonces,
parece reír.
Las estrellas desprenden
un suave resplandor.
Zapatos, zapatos
blancos
por doquier.
Tu alma se llena
de ternura.
¿Has visto realmente
caer una estrella,
allá, a lo lejos?
Una mano se tiende
y te aleja de esos
senderos de espuma.
Has abandonado
por un momento, la torre,
la apesadumbrada
torre,
en tu vida.
Zapatos,
zapatos blancos
por doquier.
El amor
Esa luna llena
esplendorosa y radiante
de las noches
cálidas de verano.
Ese pájaro
que canta
expresando regocijo
al amanecer.
Esa rosa roja
bañada por rocío,
ese niño que en silencio
la acaricia.
Esa vida única
y verdadera
a veces breve y azarosa
es belleza es pureza es amor.
La soledad apasionada del alma.
Ese afecto y esa pasión
que lleva el conocimiento
del otro. Ese anhelo
indiscutido del hombre
es belleza es pureza es amor.
Principio y fin.
Una vida que nace, una vida
que se va. La despedida última
que nos transporta a
un camino desconocido pero sí
pleno de luz cuando hemos apreciado
el resplandor auténtico de lo bello.
Todo
todo ello
puede ser expresado
en una sola palabra
y es la palabra Amor.
Agradece
Agradece,
agradece hoy
por el sol
de cada mañana.
Por el árbol
que mudo
y silencioso,
brinda sus
abundantes frutos.
Por el perfume
de la flor amada.
Agradece,
siempre agradece.
Por la vida abundante,
por la salud,
que se nos ha otorgado.
Por la prosperidad,
por las alegrías,
por el trabajo digno
que nos ennoblece.
Busca, busca
en tu corazón
las cosas que
nos engrandecen.
No olvides que,
a veces reclamamos
y reclamamos pero
nos olvidamos
precisamente
de eso, de lo esencial:
Agradecer.