Hace un tiempo hablábamos de los peligros del tránsito en Avenida Gobernador de Viana, ya que prácticamente en toda su extensión suele verse vehículos bastante excedidos de velocidad. Y puntualmente nos hacíamos eco del reclamo de padres de niños de la escuela ubicada frente al Club Progreso, que solicitaban más presencia de personal de Tránsito en las horas de entrada y salida a clases.
Pues el reclamo ha sido escuchado y contemplado. Últimamente hay funcionarios más seguido y es notorio el cambio en la actitud de los conductores. “Ahora todos respetan todo, todos aprendieron las normas”, nos decía ayer uno de los padres que hizo el reclamo.
A propósito la mamá de un niño que concurre a la Escuela Especial Nº 97, de la Avenida Batlle, nos planteaba ese mismo problema. “Hay inspectores en la (escuela) 8, acá cerca, pero en esta escuela no, y es un peligro, además en una esquina…”, nos decía.
Nos contaba además que la semana pasada felizmente no pasó nada, pero estuvo muy próximo que ocurriera un siniestro: “por poquito no atropellaron una niña”.
Sabido es que no se puede tener inspectores en todas las instituciones educativas de la ciudad, sería imposible coordinar ni se dispone del personal suficiente. Pero si algo se puede hacer, vendría muy bien. Aunque por supuesto, todo pasa por la conciencia de los conductores, de eso no hay dudas…