«Nunca nos apartamos en Ferro Carril respecto a que el fútbol es la cuestión central del club, pero no dejamos de reflejar otras disciplinas. Lo del básquetbol no es casual. Lo del Fútbol Femenino en Sub 16 tampoco y todo una búsqueda social que hace al club. Estamos felices, pero decimos también que esto es un compromiso permanente»
***********El presidente JUAN CARLOS REALINI y un directivo de primera línea, como el Dr. CÉSAR SIGNORELLI coinciden en la teoría, pero reconocen el valor de la práctica. Para los dos, «Ferro es el hacer», por eso fue terminando para la entidad de la franja un año de notable exposición, acumulando torneos, cimentando su dominio y volviendo a primar en un año, en dos frentes paralelos: Campeón Salteño en Fútbol y Campeón Salteño en Básquetbol.»Ferruya», inevitable apelativo a cuenta de Juan Carlos, lideró la lista oficialista y aunque fueron menos de 50 socios los que avalaron su continuidad, a esta altura en Ferro Carril, no hay quienes recalen en esta situación, «porque el hecho de no haber lista opositora, produce un desestímulo. Pero nosotros establecemos otra lectura: la de conformidad por parte se quien son socios, adherentes o colaboradores de la causa. No se necesita ser socio, para tender una mano».
TE CREA UN DESAFÍO»En el año 2020, la Comisión Directiva de Ferro Carril fue de las más cautas con respecto a retornar a la actividad en medio de la pandemia. En más, de los primeros clubes, que bajó la cortina una vez que en Salto se verificaron los primeros casos de Covid. Los hombres del mando fueron celosos e implacables con la estrategia: cerrar las instalaciones para evitar cualquier tipo de complicación. Pero esos meses no significaron parálisis total en los clubes, porque obras internas no faltaron: «no invertimos en fútbol, pero invertimos en áreas pendientes. En Ferro la cosa es clara: en cada área que tiene, Ferro te crea un desafío.Si hemos potenciado todo lo referido a la zona de piscinas y habilitar en su momento la cancha de fútbol 5 en la sede, geográficamente ubicada frente a los históricos vestuarios, es que todo obedeció a un plan. Quien quiere a Ferro, sabe que la actual condición de la sede es un motivo de orgullo».