1 y 2 de noviembre
El 1 de noviembre se celebra en varias partes del mundo el Día de Todos los Santos, una fecha católica que busca rendir homenaje a todos los santos que han existido a lo largo de la historia e incluso aquellas almas que ya han pasado el purgatorio y se encuentran en el reino de los cielos.
La primera celebración de un día para Todos los Santos se remonta a Antioquía en el domingo antes de las fiestas de Pentecostés durante las pascuas. Otra mención de un día común para rendir homenaje a los santos, se nombra en el sermón de San Efrén el Sirio que data del año 373, pero en este solo a los mártires y a San Juan Bautista.
No sería hasta el año 731 que el Papa Gregorio III, consagraría la Basílica de San Pedro a todos los santos y establecería la festividad el 1 de noviembre.

El 2 de noviembre Día de Difuntos o Día
de los Fieles Difuntos
Para honrar y conmemorar a los difuntos fieles de la religión católica y cristiana.
Esta fecha fue instituida en el año 998 por el monje benedictino San Odilón de Francia, siendo adoptada por Roma en el siglo XVI y posteriormente difundida en todo el mundo.
¿Qué es el Día de Difuntos?
El Día de Difuntos es un día religioso celebrado por algunas iglesias cristianas (Iglesias Cristianas Ortodoxas Occidentales, Unión de Utrecht, Comunidad de Provoo, Comunión Anglicana e Iglesia Católica), en memoria de los fallecidos.
Esta celebración se sustenta en la doctrina que establece que al morir las almas de los fieles no han sido limpiadas de pecados veniales, o bien no han sido expiadas por trasgresiones del pasado. Durante este día los creyentes ofrecen sus oraciones o sufragios, sacrificios y la misa para que los fieles difuntos lleguen a la presencia de Dios.