Ahí está la idea plasmada por Deportivo Artigas, a través de su Comisión Directiva. No es la primera que apunta a búsquedas que renueven y no solo se trata de enunciados, sino de razones en función de la realidad.
La dirigencia invoca el porqué. No manda sueños al boleo. Socava la pretensión de excesos absurdos. Alimenta en todo caso, el imperativo de variación.
Mientras que vale la pena preguntarse: la Liga Salteña de Fútbol, sus divisionales, sus campeonatos, etc, se transforman en eje de atracción, ¿o la pérdida de clientela viene siendo una consecuencia inexorable?
En relación con la temporada 2022, en la 2023 se vendieron….¡14 MIL ENTRADAS MENOS!
Algo pasó. Algo está pasando. ¿Y qué pasará?
Cambiar o no cambiar es la cuestión, previa evaluación.
¿Pero quién evalúa sin caer en el objetivo sectorial-clubista?
¿Los delegados? ¿Los neutrales?
Quién o quiénes. Esa también es la cuestión.
-ELEAZAR JOSÉ SILVA-
