La noche en que el viejo River volvió….
Era el partido que faltaba. El que hacía a la estadística. Para que esos mismos números establecieran que a falta de una fecha, River Plate podía abrazarse a la doble misión de sentirse campeón y sentirse ascendido.
Pero además, la condición de invicto que también suma, porque hace a lo histórico. Y fue una noche especial. Distinta. A la manera del viejo River,.
Porque más allá del retorno a Primera, le importa esto de ser Campeón de la Divisional «B». Al fin de cuentas, un título más. Los 39 puntos se clavan en la nueva historia.
La historia recién parida recoge a este River y hace lo que debe hacer. Potenciarlo otra vez.
ALEJANDRO TORRENS no olvida lo que pasó en el 2021. Pero ni él, ni GABRIEL DE SOUZA y menos MAURICIO OCHOA desde la Comisión Directiva, parecen coincidir en que «aquello no fue fracaso….y entonces cómo no recuperar el objetivo en lo inmediato, si había que ponerlo a River en la «A» otra vez?».
Mauricio no solo le apunta al tiempo de River en el plantel de Primera, también «en eso de favorecer todo el fútbol juvenil, por algo los juveniles que se van a Montevideo y los que han llegado a la selección. No quedarnos solo en el ascenso, sino recalar en el futuro que vamos construyendo. Es como para sentirnos felices. Bueno….estamos felices».
CUANDO NADIE SE FUE
Tanto para el propio «Ale» DT como para el «Gaby» del gol, un aspecto que no es menor, «porque haber bajado fue parte de lo injusto desde el momento que los promedios jugaron en contra. Pero el compromiso del grupo no faltó. Y en esa decisión de mantener la base, fue parte de la razón. Pero además, encarar esto de jugar en la B con la responsabilidad en cada partido, sin pensar que ninguno estaba ganado antes de empezar. Fue un acto de madurez en cada uno».
Cuando en River Plate se habla de la madurez alcanzada, es la conciencia que ejerce su propia presión, «para que en esta semana a los entrenamientos no les falte disciplina. Hay que terminar invicto. A ese último partido no hay que perderlo y meternos a ese nivel, también en la historia».
Sucede que entre la estadística de los últimos años y la colección de EL PUEBLO en la década de los 60 y 70, es haber comprobado que no ha existido un campeón de la B a la A en condición de invicto.
En River Plate bien que lo saben. Ahí está el fin. La estación que falta.
Claramente en River….¡no hay quien se quiera bajar!
