«Es para nuestra institución un verdadero prestigio que estas cenizas se posen en la gramilla de nuestro querido Parque Luis T. Merazzi, inmortalizando de esta forma la unión entre Ferro Carril y ese enorme deportista que trascendió fronteras. «Maño» Ruiz supo integrar y dirigir equipos profesionales de muchos países, incluso selecciones, lo que hace prácticamente imposible detallar su extensa y proficua trayectoria. Pero se inició en Ferro Carril. Esta fue su primera casa y a ella vuelve.
Desde niño corrió detrás de una pelota y su fallecimiento se produce justamente en un campo de juego. Como si el destino respetara su pasión. Recibir entonces sus cenizas, es un acto que hace honor a la gloria del deportista y da la institución que lo vio nacer, y muy seguramente habrá de servir de inspiración para futuras generaciones»
Ocurrió el 30 de diciembre, en la tardecita del Parque Luis T. Merazzi, contemplándose el sentir de la familia de Aníbal «Maño» Ruiz: sus cenizas esparcidas en la cancha.
No faltaron los amigos de antes y de ahora, sumándose a familiares de quien se inició como jugador de fútbol en la franja, accediendo después a la selección salteña, para ser Campeón del Litoral y tras ello, su pasaje al fútbol rentado.
El «Maño» falleció en marzo de 2017 en Veracruz (México) y ahora sus cenizas encuentran este remanso final en el campo de juego de su Ferro Carril.
En las tomas gráficas, captación de los momentos vividos y sobre la urna, el ramo de flores, más dos camisetas: la de Ferro Carril y la de Puebla, el último club en que Aníbal «Maño» Ruiz desarrolló la función de entrenador. Nelson y MIguel, sus dos hermanos, en una ceremonia a la que no le faltó contenido emotivo. El «Maño» Ruiz….en la memoria colectiva.
Desde Ferro Carril y con encendida proyección, hacia el universo del fútbol. Lo fue.
