Una nota exclusiva de JUANJO ALBERTI, desde Montevideo
UN DÍA COMO EL DE HOY, PERO DE 1998
Hace 20 años atrás dejaba de existir Frank Sinatra, «la voz». Ocurrió el 14 de mayo de 1998 en West Hollywood, California, a la edad de 82 años, debido a un ataque al corazón. Había ofrecido su último recital en el Desert Springs Resort and Spa del Hotel Marriott, el 25 de febrero de 1995, en una celebración privada de unas mil doscientas almas celebrada el último día del torneo de golf Frank Sinatra Desert Classic. A finales de ese año, su entrañable amigo Dean Martin moría y el cantante se sumió en una tremenda depresión. En noviembre de 1996, un mes pasado de su última aparición en público en el baile a beneficio del Carousel de Los Ángeles, ingresó en el hospital, así como dos veces más en enero de 1997, apareciendo en titulares en prensa oral y escrita de todo el mundo. A fines de abril del mismo año el Congreso de Estados Unidos votó concederle a Sinatra, la «Medalla de Oro del Congreso», ante la propuesta del diputado demócrata de Nueva York, José E. Serrano. Con estas actividades cerró la vida de una larga carrera de más de seis décadas de cantante, actor, empresario y productor. Toda una leyenda del cine y la música de los Estados Unidos.
CON LOS HOBOKEN FOUR GANA EL CONCURSO
La participación de Frank Sinatra en el evento de radio Major Bowes Amateur Hour, luego de haber cantado por algunos reductos, le fomentó el inicio de su carrera como artista. Se presentó acompañando al trío Three Flashes, que para esa ocación se hicieron llamar Hoboken Four, y sorpresivamente obtuvieron el primer premio, lo que les reportó una tournée promovida por el espacio de la broadcaster. Sin embargo, no se llevaba bien con sus compañeros, y a los tres meses los dejó, regresando a casa. Al poco tiempo, el trompetista Harry James llama a la emisora para preguntar cómo ubicarlo; de manera inmediata le hace sonar el teléfono de su casa y le ofrece incorporarlo a la banda que terminaba de formar. Convencido, allí fue Sinatra donde llamó la atención de críticos y espectadores, pero la orquesta tuvo problemas financieros estando a punto de disolverse. Al final, sus dotes de cantante fueron reconocidos por Tommy Dorsey, que buscaba un vocalista para reemplazar a Jack Leonard. Según «la voz» aprendió mucho en la banda de Dorsey, considerándolo un verdadero maestro del show business.
«I’LL NEVER SMILE AGAIN»: PRIMER NÚMERO UNO
El primer número uno de Frank Sinatra en el semanario Billboard lo consigue en 1940, acompañado de Tommy Dorsey, con «I’ll never smile again», logrando una gigantesca repercusión, la cual puede considerarse el puntapié inicial de Sinatra, no solo como cantante sino como fenómeno social. Luego registraría varios temas más que fueron hits de popularidad y ventas. En 1941 participa por primera vez en una película: «Las Vegas nights», de Ralph Murphy, actuando justamente con la orquesta de Dorsey. Al siguiente año, decide lanzarse en solitario, convirtiéndose en un ídolo de multitudes, especialmente entre las damas jóvenes. Entrada la Segunda Guerra Mundial, Sinatra no participa apoyando a las fuerzas, lo que sumado a su fama de mujeriego, no haría sino aumentar la leyenda que lo uniría con la Mafia y terminaría con el FBI revisando sus cuentas. El no se detendría, las marquesinas doradas de los espectáculos y del séptimo arte estarían iluminadas con su nombre a través del tiempo, paseando su voz, presencia y estilo, por todo el territorio norte americano, y el planeta tierra.
«NEW YORK, NEW YORK» y «STRANGERS IN THE NIGHT»
Grabó muchos temas que los convirtió en himnos mundiales, «New York, New York» y «Strangers in the night», entre tantos, en las fonográficas Columbia, Capitol, y en su propia empresa disquera, Reprise, que en nuestro país representaba Clave Iemsa. Tras la formación de su nueva discográfica, más otras productoras de cine y televisión, Sinatra había ganado en 1960, una cifra aproximada a unos veinte millones de dólares. Su fama y vigencia trastornó su vida familiar, se había casado en 1939 con Nancy Barbato, teniendo tres hijos con ella. Habiendo infidelidades del cantante, se anuló el matrimonio el 31 de octubre de 1951, y breve tiempo después se casaría con Ava Gardner, pasando la luna de miel en Cuba, residiendo en el Hotel Nacional de la Habana. Al tiempo hubo peleas violentas, borracheras, intentos de suicidio de parte de Sinatra, y el 27 de octubre de 1953 se separaron. Al divorciarse de Ava encontró el hombro y el corazón de Marilyn Monroe, que también se había distanciado de su marido Joe DiMaggio. Se hicieron íntimos y Marilyn se fue a vivir con Frank, poco antes de la desaparición de la actriz. Se casó por tercera vez con Mia Farrow en 1966, durando dos años con ella. La cuarta vez fue con Barbara Marx. Paralelamente, le sobraba tiempo para el «Clan Sinatra» que manejaba con un montón de amigos de la farándula, donde realizaban fiestas sin escatimar gastos ni placeres. Más allá de la nostalgia.