Una persona nos comentaba ayer, que a un familiar suyo le habían llamado la atención los inspectores de tránsito «porque iba conduciendo hablando por celular». No supo decirnos si había sido multado o todo quedó solo en la advertencia. Pero lo que nos decía además, es que habitualmente se ven camionetas de la propia Intendencia cometiendo infracciones («como estacionar sobre una senda peatonal, tengo fotos en la diagonal Centenario», nos decía).
Se podría agregar que hay choferes de la Policía (que también suele participar de los operativos) para los que conducir tomando mate es común. No vendría mal predicar con el ejemplo.
De hecho, fue muy comentado en las redes sociales ayer, que quien conducía una camioneta de la Intendencia por la avenida Manuel Oribe, arrojó por la ventanilla una botella de plástico (con algo de líquido aún en su interior) y golpeó en la cara a una mujer que transitaba en moto. No solo estaría fuera de lugar la velocidad a la que iba la camioneta (según la persona afectada) sino que también se debería dar el ejemplo en cuanto a limpieza de la ciudad.

Vecinos de la parte más al norte del Cerro nos plantean que «se han olvidado» de sus calles. Recibimos planteos por mal estado de Bolivia y de Herrera y Obes, en ambos casos entre Chiazzaro y República Italiana.