En la jornada de ayer, recibimos varias fotos donde se observaba a más de una persona durmiendo alrededor del estadio de básquetbol Arnoldo Bernasconi -en Salto Nuevo- apenas resguardadas por los muros del estadio, casi a la intemperie. Es la realidad de personas en situación de calle que lamentablemente se repite también en otros puntos de la ciudad, y que se hace más notoria en los meses de frío.
Hablando de Salto Nuevo, la falta de alumbrado público sigue preocupando a los vecinos de la zona de Florencio Sánchez y Catalán. Pero además, nos dicen, se suma el problema de árboles peligrosamente recostados al cableado de UTE.
«Llamamos a UTE y nos dicen que eso le corresponde a Servicios Públicos (Intendencia), pero llamamos a Servicios Públicos y nos dicen que le corresponde a UTE, y así seguimos», nos contaban ayer.
La violencia entre jóvenes estudiantes, pero principalmente con algunas «barras» que se acercan a las instituciones educativas en horas de la salida de clases, viene siendo preocupante.
Hemos sabido que en los últimos días, la rápida y buena respuesta de las autoridades de la educación, así como de efectivos policiales, evitó que algunas situaciones pasaran a mayores. Como bien nos decía alguien ayer, «la violencia está en todos lados, en algunos se hace más visible, como el deporte o la educación».
