Es frecuente que nos hagamos eco en esta misma columna de reclamos por pérdidas de agua, en distintos punto de la ciudad, lo que para muchos es “un verdadero desperdicio”, justo en tiempos en que se le pide a la gente un manejo racional de los recursos naturales.
Una recorrida rápida por el centro de Salto estos días, permite comprobar que son tantos los lugares donde hay pérdidas de agua, que se hace difícil detallarlos a todos. Digamos solo a modo de ejemplo y centrándonos en los que tienen problemas más grandes: calle Artigas al 1800, calle Brasil al 1400, intersección de Blanes y Brasil…
Vecinos de Plaza Flores vuelven a plantear el tema de la luz que no funciona en el lado de calle Charrúa. “Ya hace un mes de esto”, nos dicen, y la solución no llega.
Hablando de quejas. El estado del Cementerio Central es motivo de muchos reclamos últimamente. Textualmente un lector nos transmitía ayer: “El cementerio muestra un abandono total. En mis 70 años, nunca vi algo así. Los caminos sucios, el pasto en algunos lugares llega hasta las rodillas. ¿No se corta el pasto y no se limpia porque es un lugar que no es muy visible? Me parece una vergüenza”.
También sobre el cementerio de Barrio Artigas hemos recibido planteos similares. Una pena. Ojalá se empiece pronto con las necesarias tareas de mejoramiento.
