«Miren que el Cerro es grande, porque tiene adentro varios barrios más pequeños, y sin embargo no creo que ningún vecino de todo el Cerro haya podido descansar y dormir bien el viernes de noche». Ese fue el planteo que nos llegó de un lector ayer, refiriéndose al altísimo volumen de la música que se escuchó, una vez más, durante toda la madrugada.
El suicidio del futbolista «Morro» García conmocionó y dio mucho que hablar a todo el país. Fue en febrero. Pero después, fueron otros los jugadores de fútbol que tomaron la misma decisión. En la última semana fueron dos, el más reciente ayer. «¿Será que sobre estos muchachos recae mucha responsabilidad y expectativas ajenas, un peso que luego se les hace difícil soportar? Me parece que ahí puede estar el problema», comentaba ayer una persona vinculada al deporte.
En la tardecita del viernes, un motonetista transitaba tranquilamente contra flecha por calle 19 de Abril, próximo a Viera. Es apenas una muestra de que el tránsito en Salto siempre presenta cosas inesperadas, y peligrosas por supuesto.
A propósito, vecinos de calle San Martín, en zona del barrio de igual nombre, están muy preocupados por la velocidad con que se transita allí. Hace dos o tres días, en San Martín casi Vilardebó una camioneta atropelló un pequeño perro, los vecinos enseguida se preguntaron: ¿y si fuera una persona?
