«De todas partes vienen», como dice la canción. Es que llegaba gente de todos lados: unos con gatos, otros con perros… El movimiento en el barrio San Martín y todo su entorno fue muy intenso durante toda la jornada de ayer. Sucede que en el salón comunal del barrio Jardines de Don Bosco, frente a la Capilla de ese nombre, se realizaron una vez más las habituales «castraciones económicas».
Gente de muchísimos barrios no desaprovechó la ocasión. Las castraciones comenzaban a las 8, pero alrededor de las 6 ya había gente esperando para obtener su número. Y la jornada se extendió hasta que oscurecía.
No solo la labor de castración merece destacarse sino, además, en estos tiempos, la buena organización en cuanto a la distancia que cumplían quienes aguardaban, y otras medidas del protocolo sanitario que se cuidaron rigurosamente. Son cosas que no deberían destacarse sino observarse con naturalidad, si se piensa que se trata de medidas tomadas por el bien de todos, pero ante tanto incumplimiento que se observa a diario en tantos ámbitos, no está de más mencionarlo como cosa buena.
Hablando de animales, muchas consultas llegan a esta Redacción sobre el rugido que se oye en zona del Parque Harriague. «¿Qué es, si se llevaron todos los animales?», consultaba ayer una señora. La explicación es esta: un león quedó. Es viejo y estaría ciego. A todos sus males, ahora se suma la soledad.