Las novedades surgidas en torno al servicio de ómnibus se ganaron el comentario generalizado por estos días. Dos noticias principales: que vuelve el servicio los días domingo y que el boleto pasará a costar 15 pesos.
La primera es aplaudida por todos, porque se trata además, de algo sumamente reclamado por una gran parte de la población. La segunda ha despertado polémica. Están por un lado los que entienden que es adecuada la suba y por otro los que se resisten a un aumento, cualquiera sea este.
Pero hay un tema del que también se habla mucho y no es ni el precio ni la circulación los domingos, sino la necesidad de que los ómnibus cumplan los horarios, para lo que seguramente se precise en algún caso agregar más vehículos. Especialmente se quejan los usuarios de las líneas 6 y 11, que entienden que pasar cada 55 minutos es demasiado intervalo.
Empezaron los días de calor y los comercios se renuevan; también quienes venden en puestos callejeros. Calle Uruguay y algunas otras calles del centro ya muestran sombreros, protectores solares y hasta sombrillas en algún caso. Todo sirve para generar un ingreso extra o incluso un ingreso económico fundamental para hogares que dependen de esas ventas para subsistir.
Los adornos para el árbol de navidad y otros elementos alusivos a tal celebración también han empezado poco a poco a inundar vidrieras y puestos callejeros.
