Con temperaturas mínimas que rozan los cero grados, la ciudad despertó cubierta por una densa neblina y un aire cortante que obliga a abrigarse incluso en las primeras horas de la tarde.
En ese contexto, Rodrigo Tejeira recorrió distintos puntos de la ciudad y capturó postales que reflejan la atmósfera invernal: calles vacías, el río crecido y una quietud que parece suspender el ritmo habitual de los días.
Las imágenes forman parte de un registro audiovisual acompañado por el poema Rocío de Marosa di Giorgio y la pieza Invierno, de Antonio Vivaldi, que puede verse en nuestras redes y en el canal de YouTube de El Pueblo. La combinación entre lo visual y lo musical potencia la sensación de inmersión en una estación que, más allá de su crudeza, también deja espacio para la contemplación.
Desde el CECOED y las autoridades departamentales se exhorta a extremar los cuidados frente a las bajas temperaturas, especialmente con población vulnerable y personas en situación de calle.
El frío recién comienza y todo indica que Salto tendrá muchas más madrugadas como esta.