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Un par de días antes, desde la Comisión Directiva de Ceibal, se reveló un comunicado que bien vale la pena recrearlo: «El partido clásico de este domingo fue autorizado por la policía , se realizaron todos los trámites correspondientes. Ahora a disfrutar de la fiesta del fútbol sea cual sea el resultado debemos saber qué es simplemente un partido y que gane el que haga mejor las cosas en los 90 minutos.
Se disputarán dos partidos este domingo será el primero y la revancha se jugará el domingo 7 de abril, el equipo que obtenga mayor cantidad de puntos en ambos partidos se llevar la copa » del sur», en caso de igualdad en puntos se definirá desde el punto penal sistema FIFA»
Se consignaba asimismo que la parcialidad de Ceibal iría a aguardar 15 minutos después de finalizado el partido, antes de abandonar el escenario, hecho que por otra parte se cumplió a rajatabla.
Para EL PUEBLO, la calificación fue una: el partido amistoso entre Ceibal y Salto Nuevo estando en disputa la Copa del Sur, significó EL IMPACTO DEL DOMINGO. No solo por los 1.400 aficionados que asistieron, sino por la corrección imperante. No hubo que lamentar un solo incidente y hay que admitir que los jugadores aportaron su cuota, porque el objetivo fue el de JUGAR. Mientras Ruben Ferreira ejerció normalmente con acierto el control del partido.
La coordinación básica con el Comando de Jefatura de Policía, para que todo se encauzara de la mejor manera posible. Al día siguiente en comunicación con EL PUEBLO, el Vice Presidente de Ceibal, ALVARO MARTÍNEZ, dejó una frase que bien vale la pena tener en cuenta: «Demostramos que la cancha de Ceibal tiene garantías para jugar todo el año».
A «Toquera» (inevitable aplicar el seudónimo), no le faltó extendida valoración a las hinchadas de Ceibal y Salto Nuevo «y a todos quienes fueron directos colaboradores del espectáculo».
A todas luces resultó una fiesta del fútbol. La pasión barrial de Salto Nuevo y Ceibal resultó incuestionable. La anécdota del resultado y la brillantez de la fiesta.