El pasado domingo publicamos en esta página expresiones del Arquitecto Juan Carlos Ferreira, a nuestro entender de los mayores entendidos en el tema de la arquitectura de Salto, en las que destacaba a las figuras de Armando Inocencio Barbieri y de Antonio Invernizzi como principales impulsores de la edificación en nuestra ciudad. Bien podría decirse que Salto mejoró y modernizó su arquitectura gracias a la sabiduría de estos dos hombres. Agregamos hoy algunos datos para el mejor conocimiento de ambos.
Armando Inocencio Barbieri
Nació en Salto en el año 1894. Fue un salteño que dedicó su vida fundamentalmente a la política y la docencia. En el primer caso, accedió a los siguientes cargos: Intendente Municipal (1951-1955); Senador y Presidente de la Asamblea General (1955-1959); Director del Banco Hipotecario del Uruguay (1960-1962) y Presidente del Consejo Departamental de Salto. En cuanto a su trayectoria docente, vale destacar que fue Director fundador de la Escuela Industrial de Salto y Director del Liceo Nocturno de Salto, institución que años más tarde llevaría su nombre (hoy “desaparecida” al pasar a formar parte del liceo Nº 5, como Turno Nocturno). Igualmente, dicho liceo lleva su nombre. Según Juan Carlos Ferreira, “lamentablemente su trascendente faceta como político, opacó de alguna forma al notable arquitecto que fue”. Barbieri falleció en 1964.
Antonio Invernizzi
Maestro constructor nacido en el año 1831. Ciudadano de la provincia de Como, al norte de Italia. Se radica en Salto en 1858 y entre los progresos materiales que le debe esta ciudad puede mencionarse: construcción del edificio de la Junta Económica Administrativa, del Instituto Politécnico Osimani y Llerena y de institutos sanitarios. Pero quizás su aporte más significativo radica en las “construcciones a plazos”, impulsando así, definitivamente, el progreso edilicio de Salto. Falleció en el año 1909 y, según Juan Carlos Ferreira, Salto le debería un reconocimiento aún mayor al hecho de que una calle de la ciudad lleve su nombre.
