Monumento a los Trabajadores, la obra que proyectó Rodríguez Musmanno
Días pasados, EL PUEBLO retomó un tema para muchos olvidado: la construcción de un monumento en homenaje a los trabajadores, que diseñó el arquitecto y artista plástico César Rodríguez Musmanno en sus últimos meses de vida.
En nota publicada el domingo 10 de abril de este año, se recordaba que la idea era construirlo en la Plaza 1° de Mayo, ubicada en la zona portuaria de nuestra ciudad, y que el artista ya tenía muy avanzado el proyecto, aunque hasta ahora no se concretó. Incluso, dieron su opinión algunos familiares, como su hijo Gustavo Rodríguez y su nieta, la profesora Soledad Rodríguez.
Luego, este diario puedo saber que desde la Junta Departamental se continúa con algunos trámites y que hay ediles, como pablo Alves Menoni (Vice Presidente) muy interesados aún en que la obra se lleve a cabo. Pero además, EL PUEBLO recibió estas palabras de su otro hijo, Fernando Rodríguez, quien se encuentra radicado en la capital del país y fue quien estuvo más cerca de su padre durante los días de planificación de la obra:
«Toda esta idea nace en mi padre, dada su gran dedicación de toda la vida a la pertenencia al entramado social de su ciudad, Salto. El haberse brindado al movimiento cooperativo, no solo proyectando sus viviendas, sino que también enseñando el espíritu de la solidaridad y la cooperación. Siempre estuvo al lado de los trabajadores firmando y enseñando a los obreros del Sunca en Salto los aspectos técnicos de la profesión en las distintas categorías de la profesión.
Es así que él busca darle un monumento, que sería único en el país, en un lugar que se convertiría en un emblema de empoderamiento de los trabajadores y no sólo en las festividades del 1° de Mayo, sino en las variadas actividades y manifestaciones de los trabajadores salteños.
Hasta pocos días antes de fallecer Ojito, paseaba su carpeta con el proyecto del Monumento a la espera de la noticia de su aprobación por parte de la Junta Departamental.
Unos meses antes habíamos tenido una última reunión en la Intendencia de Salto con jerarcas y representantes del Sunca, a quienes se les había encomendado el aporte de la mano de obra de la ejecución.
Luego supimos que había surgido un contratiempo legal ya que Jurídica de la Junta había descubierto que el predio de la plaza no revista en los padrones municipales sino que pertenecían a la Administración Nacional de Puertos. Y allí quedó frenada la gestión.
César no perdía las esperanzas de que pudiera solucionarse el tema burocrático y legal, prontamente.
Pero hasta el día de hoy…».