El edil departamental Facundo Marziotte presentó ante la Junta Departamental de Salto el proyecto “Puntos del Abrazo Social y Conexión Comunitaria”, una propuesta que busca impulsar espacios públicos especialmente pensados para fortalecer el encuentro humano, promover la conversación y contribuir al bienestar emocional de la comunidad.
La iniciativa plantea la instalación de bancos enfrentados, señalética positiva, información accesible sobre servicios de apoyo psicológico y cargadores solares para celulares. La idea es generar entornos que inviten a las personas a detenerse, sentarse y conversar, pero también a acompañarse en momentos de soledad.
Marziotte aseguró que la salud mental es hoy “uno de los grandes desafíos del siglo XXI”, y destacó la importancia de abordarla desde lo cotidiano. “En Salto vemos jóvenes que se sienten solos aun rodeados de gente, adultos mayores que pasan días sin una charla y familias que viven corriendo sin detenerse a respirar. Eso también es salud pública”, afirma .
Inspirado en experiencias internacionales el edil destacó que este tipo de intervenciones ha demostrado ser capaz de mejorar la convivencia social y reducir sensaciones de aislamiento. También remarcó que los “Puntos del Abrazo Social” no tienen un enfoque romántico, sino estrictamente comunitario. “Son espacios para conversar, acompañar y escuchar. Lugares que recuerdan que la salud mental también se cuida con gestos simples: con presencia, con palabras y con comunidad”.
Romper la barrera social
En entrevista con EL PUEBLO Marziotte profundizó sobre la propuesta.“Una cosa que nos parece importante es poder bajar a tierra las propuestas. Encontramos esta experiencia en Estados Unidos e Inglaterra, que consta de algo muy sencillo, un par de bancos enfrentados o en L, con un cargador solar para que la persona pueda dejar el celular y disfrutar ese momento, ya sea sola, acompañada o esperando que alguien se arrime.”
El edil enfatizó que estos puntos buscan romper una barrera social.
“Uno puede ver a alguien solo en una plaza y difícilmente se acerque a charlar si no lo conoce. En estos lugares esa barrera no existe. Eso es lo importante y lo que queremos que funcione.”
La propuesta incluye además un tótem con mensajes positivos y códigos QR que redirigen a información útil sobre servicios de salud mental, tanto públicos como privados, además de datos sobre tratamiento de adicciones. Marziotte destacó que la inversión económica es mínima, oscilando entre $10.500 y $18.500 por punto, lo que permitiría su instalación progresiva en barrios y plazas sin grandes erogaciones presupuestales.
“Es un aporte más, con una inversión mínima y un impacto que puede ser importante. Para algunos puede parecer sencillo, pero para nosotros es bien significativo y, sobre todo, es plasmable, que es lo más importante.”, sostuvo.
El proyecto ya fue remitido al Intendente de Salto, al Secretario General, al Director de Obras, al Encargado de Espacios Públicos, al Director de Salud e Higiene y a las comisiones de Salud y Obras de la Junta para su análisis e implementación.
En cuanto a posibles ubicaciones Marziotte indicó que aún no se definieron puntos concretos pero adelantó que podrían comenzar en plazas centrales y luego expandirse. “Hay que apostar a que se usen y que no queden como un saludo a la bandera. El objetivo es que quienes a veces se sienten solos tengan la oportunidad de conversar con un vecino que ven todos los días y aún no conocen.”
Consultado sobre el trabajo binacional en salud mental con la ciudad argentina de Concordia, señaló que la iniciativa había quedado en pausa tras el cambio de periodo, pero recientemente ambas instituciones retomaron el vínculo. “Uno de los temas que volvimos a poner sobre la mesa fue la salud mental. Seguramente lo seguiremos trabajando el próximo año en conjunto.”
Marziotte concluyó que el objetivo final es aportar soluciones reales desde el lugar que ocupa , mejorar la vida de las personas mediante acciones simples pero transformadoras.









